La región de Flandes o región Flamenca, es una de las más apreciadas por el turismo en Bélgica; y es que, justo aquí, encontramos destinos apetecibles tales como Amberes, Brujas, Bruselas, Gante, Malinas, Lovaina... Se trata de ciudades realmente importantes, las cuales atesoran un amplio patrimonio cultural. Si bien es cierto que la parte cultural es más que suficiente para viajar a Flandes, además, cuenta también con un riquísimo patrimonio gastronómico, compuesto por platos exquisitos con ingredientes autóctonos que harán las delicias de los turistas más exigentes.
Sabores en Bruselas
Bruselas, capital de la región y del país, no es sólo famosa por su Grand Place o el Atomium. Aquí, en el corazón de Flandes, también puedes aventurarte en un recorrido gastronómico lleno de sorpresas. Encontramos, por ejemplo, ingredientes que han sabido traspasar las fronteras belgas introduciéndose de lleno en la cocina internacional, como es el caso de las endivias.
Fue allá por el siglo XIX, cuando un campesino de los alrededores de Bruselas descubrió que en una de las raíces de achicoria silvestre crecían extraños brotes, los cuales resultaron comestibles. Estos brotes eran endivias, y a partir de ese momento, en Bruselas se han especializado en la elaboración de platos con dicho producto. De sabor amargo y con muy pocas calorías (una por hoja), las endivias se pueden probar de mil formas, destacando platos como el de las endivias gratinadas.
No te olvides que, como capital de Flandes y Bélgica, Bruselas cuenta con una amplísima tradición chocolatera. En Flandes se producen más de 100 toneladas de chocolate al año, tanto para sus ciudades como para la exportación. En esta ciudad, trabajan grandes chocolateros como Pierre Marcolini o Laurent Gerbaud. Es recomendado conocer una de sus chocolaterías, pudiendo además realizar catas de este delicioso dulce en todas sus variedades. En la Grand Place, por ejemplo, encontraremos algunas de las chocolaterías más antiguas y con mayor surtido de bombones y chocolates en general ¿Quieres más información sobre esta tradición? Visita lugares turísticos como Belgian Chocolate Village o Planète Chocolat.
Otra de las paradas obligatorias en Bruselas es una de sus cervecerías. No te costará encontrar lugares con una amplia variedad, pudiendo destacar cervezas de fermentación espontánea como Lambic o Geuze, cervezas de alambique realmente tradicionales en la ciudad que se elaboran aún en cervecerías como la de Cantillon.
Brujas, estrellas Michelín entre canales
Brujas es otro ejemplo de la rica gastronomía flamenca. Es una de las ciudades con más estrellas Michelín per cápita, algo que ya nos asegura una cosa, comer bien.
De los sabores más típicos de Brujas quizá podamos destacar algunos de sus guisos y estofados. Son famosos platos como el Vlaamse Stoverii, o lo que es lo mismo, estofado de ternera con cerveza negra o tostada, patrimonio culinario de la región. Esta receta es un claro ejemplo de la tradición de Flandes; y es que encuentra sus orígenes en la Edad Media.
Seguro que muchos conocéis la tradición belga de comer mejillones con patatas, pues cuenta una leyenda que fue precisamente aquí, en Brujas, donde nacieron las archiconocidas patatas a la francesa. Prueba una buena cazuela de mejillones con guarnición de patatas, acompañada por una de las cervezas de esta región.
Y hablando de cerveza, disfrutar de algunas de las más conocidas del país será posible aquí, en Brujas, pero, además, también tendrás la oportunidad de aprender un poco sobre la tradición y la vinculación de la ciudad a esta bebida, recorriendo lugares como el Brugs Bier Museum. Como cerveza a destacar, aquí, la más tradicional es la Brugs tarwe, blanca de trigo. En cuanto a cervecerías, son muchas las que podrás visitar, entre las que destacan la mítica Halve Maan o la Bourgogne des Flandres, recientemente inaugurada.
Nuevamente hay que destacar las chocolaterías de esta ciudad; y es que Brujas es la ciudad que más chocolaterías-fabricantes tiene en el país, más de 50. Aquí mismo podrás visitar el taller de Dominique Persoone, considerado como el mejor chocolatero del mundo. Un buen momento para dejarse seducir por un “Tequila bombón”, con sal madox y una pequeña dosis de tequila.
Tradición viva en Gante
¿Y Gante? ¿Qué se puede decir de Gante? Aquí también destacan platos con tradición, de esos que cuentan historias. Por ejemplo, el Waterzooi, otro de los platos más conocidos de la gastronomía flamenca.
En sus orígenes, era realizado con pescado de los ríos que bañaban la ciudad, el Lys y el Escalda. No obstante, con el tiempo, la pesca libre se prohibió en estos ríos, consiguiendo que el plato evolucionara y comenzara a cocinarse con pollo. Si bien es cierto que en la ciudad de Gante puedes encontrar su versión con carne, también es posible encontrar Waterzooi original a base de pescado, verduras y crema de leche. Además, si quieres probar una cerveza típica de esta ciudad, busca en la carta la Kwak, una cerveza marrón con un ligero sabor a regaliz.
No todo es cerveza en Flandes. Lo cierto es que también podremos encontrar licores típicos como el Roomer. Se trata de un licor artesanal fabricado en la ciudad de Gante. Se hace a base de flores de saúco. Uno de los grandes favoritos por los autóctonos para tomar el aperitivo.
Para postre, nada como un buen cuberdon. Conocido también como neuzeke, tsoepke o Gentse neus, por su parecido con una nariz. Está elaborado de almíbar, gomba arábiga y cierto aroma a frambuesa. Este delicioso dulce se debe comer fresco, pues de otra forma su cáscara se volvería demasiado crujiente. Se puede comprar en todo Flandes, aunque es muy típico ver estos caramelos con forma triangular apilados en el Groentenmarkt de Gante.
El puerto de Amberes
Amberes fue, durante mucho tiempo, un puerto de gran importancia para esta región. Hasta sus aguas llegaban alimentos y especias de todo el mundo, perfilando así una gastronomía realmente elaborada, con ciertos toques afrancesados.
Como es de esperar, aquí, los productos del mar son imprescindibles. Además de los afamados mejillones, en Amberes podrás probar un producto único, el camarón flamenco gris, conocido también como Purus. Es pequeño, pues pelado no mide más de una pulgada, pero su sabor es mucho más pronunciado que los camarones grandes. Pruébalos estofados con tomate, zumo de limón y mayonesa, una receta muy interesante conocida como Tomaat Garnaal.
La mejor bebida para degustar los manjares de Amberes es la cerveza conocida como Bolleke de Koninck, una ámbar de alta fermentación, para los paladares más exigentes. También se puede degustar en la nueva cervecería De Koninck.
Lovaina y Malinas, tradición cervecera
Aunque la Carbonada a la flamenca es un plato que se podría probar en cualquier ciudad de la región, en Lovaina cuenta con un sabor especial; y es que se cocina con una cerveza tradicional de esta ciudad, la Nostra Domus amarga, de la mítica cervecería Domus. Es con este brebaje con el que se guisa muy lentamente la carne de buey con otros ingredientes como cebolla y mostaza.
Como dato importante, hay que saber que Lovaina está considerada como capital de la cerveza. No es de extrañar, teniendo en cuenta que ya desde la Edad Media su elaboración casera era un oficio organizado. En el siglo XX contaba con más de 30 fábricas activas, por lo que la tradición con esta bebida, aquí, en Lovaina, es mucha. De estas fábricas quedan pocas, pero aún es posible visitar la conocida fábrica de Stella Artois.
Para poner punto final a una ruta gastronómica en Flandes, descubre Malinas. Aquí, entre otras cosas, se cocina la Mechelse Koekoek. Se trata de una gallina de plumas grises y negras que cuenta con una carne bastante sabrosa. Se cocina de muchas formas, aunque normalmente se suele encontrar acompañada de verduras y una salsa, que como no podía ser de otra forma, lleva como ingrediente principal la típica cerveza local.
También recomendamos conocer la cervecería Het Anker, en la que se elabora la genuina cerveza de Malinas desde hace nada más y nada menos que 500 años. De esta cervecería es destacable la cerveza Carolus. Su nombre le viene dado debido a que el mismísimo Carlos V de Alemania y I de España era un ferviente admirador de este brebaje. El emperador del Sacro Imperio Romano pasó gran parte de su juventud en Malinas, lugar en el que reconocería esta cerveza como su favorita. A día de hoy aún podrás degustarla.
Flanders Kitchen Rebels
Por si todos estos platos y cervezas no fueran suficiente, Flanders es, además, el terreno perfecto de pruebas para los Flanders Kitchen Rebels.
Los Flanders Kitchen Rebels reúnen a 25 chefs destacados de menos de 35 años que demuestran en cada una de sus creaciones su amor por la gastronomía flamenca. Miman y cuidan el producto más natural de la tierra, innovando y creando platos deliciosos con una pizca de rock ´n´roll.
Descubre Flandes en 8 días
Una opción para recorrer toda esta histórica región belga es realizando un tour por estas ciudades, pudiendo así descubrir algunos de los restaurantes más típicos y famosos con los platos y cervezas que hemos visto antes. Por ejemplo, podría interesarte el tour Sabores de Flandes, 8 días por ciudades como Malinas, Amberes, Gante, Oudenaarde, Brujas, Bruselas o Lovaina que te acercarán a sus tradiciones, y por supuesto, a su mesa.
Esta propuesta tiene un precio de 599€, y en su precio se incluyen los vuelos de ida y vuelta a Bruselas, las noches de hotel y los billetes de tren que se necesiten para viajar de una ciudad a otra. Además, ofrece la posibilidad de reservar restaurantes y cervecerías en todos los destinos.
Más información de Flandes: www.flandes.net
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