La primera vez que oí lo de "robot de cocina" fue en boca de un amigo hace ya muchos años, cuando era un crío. Mi mente infantil pronto se imaginó a un Robocop cocinillas preparando una pizza, por lo que al señalarme una Thermomix en la cocina de su madre, mi decepción fue mayúscula. ¡Aquello no era un robot!
No es que la Thermomix y los otros robots de cocina similares no me parezcan interesantes y prácticos, pero llamarlos robots me parece una ofensa al género de la ciencia ficción, y realmente tampoco es que cocinen solos del todo, pues hay que preparar y echar ingredientes, ajustar potencias y velocidades y, en general, seguir unos pasos. Se podría decir que son el pinche perfecto, pero Cooki quiere ser chef y convertirse en el robot de cocina definitivo.
La idea que propone Cooki es diferente a la de los procesadores de alimentos que actualmente llamamos robots de cocina. Su objetivo es que nosotros no tengamos más que elegir la receta y apretar un botón. Él hará el resto. Irá vertiendo los ingredientes y condimentos en el momento adecuado, ajustará las temperaturas e incluso removerá la comida con su brazo robótico, tal como lo haríamos nosotros.
Lógicamente, el rango de recetas que puede preparar está limitado a todo lo que nosotros podríamos cocinar en un sartén o una olla, pero eso no es poco: carnes, pescados, arroces, pasta, sopas, guisos... La lista puede ser bien grande.
¡Pero igualmente hay que cortar y preparar los ingredientes! Efectivamente, si nos fijamos en cómo funciona el aparato, simplemente se encarga de verter los ingredientes de unas bandejas y cocinarlos a la temperatura adecuada, removiendo mientras tanto.
La solución propuesta por Cooki es, atención, un sistema de bandejas con los ingredientes ya preparados que podremos comprar online y guardar en la nevera, a modo de "cartucho" que pondríamos en la máquina para que luego ésta los cocinara siguiendo la receta. ¡Es como una cafetera monodosis pero para la comida! Aunque también se parece mucho a esta barman robótico.
Lo sé, a estas alturas de la película estamos todos flipando en Technicolor™, pero la cosa tiene cierto sentido en Estados Unidos, un país donde la gente no parece tener tiempo para cocinar y la comida precocinada es la norma, pero al mismo cada vez están más preocupados por los problemas de salud derivados de una mala alimentación.
Por eso inventan cosas como Cooki, el robot de cocina definitivo, que en teoría les permitiría comer sano sin tener que hacer más esfuerzo que el que hacen actualmente para prepararse un café, aunque eso signifique que a largo plazo sus hijos piensen que las cebollas y las patatas crecen ya cortadas y empaquetadas, listas para que una máquina las cocine.
Si os ha gustado la idea, aún estáis a tiempo de financiarla para que se haga realidad. Por 337 euros al cambio podéis conseguir este robot de cocina que promete no tener un aspecto tan industrial cuando finalmente salga a producción a finales de este año. De momento, algo así no tiene cabida en mi cocina.
Vía | Eater
Más información | Cooki en Indiegogo
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