Yo no soy nada de alimentos precocinados, me parecen mucho más caros que hacer la misma cantidad de tu comida casera, y además siempre me parecen que pecan de ser excesivamente salados y condimentados. Y resulta que esa impresión que me daban es cierta, pues la Organización de Consumidores y Usuarios, la OCU, ha realizado un estudio entre 209 alimentos procesados para comprobar su contenido en sal.
Tras el estudio se ha llegado a la conclusión que el contenido en sal ha aumentado un 6% respecto a un estudio similar llevado a cabo en el 2010, porcentaje elevado si tenemos en cuanta que la sal en exceso puede producir serios problemas de salud, siendo uno de los más importantes la hipertensión arterial.
Este 6% de aumento en la cantidad de sal no ha evolucionado de la misma manera en todos los grupos de alimentos estudiados, así ha disminuido en productos como las croquetas y empanadillas congeladas, cremas y sopas, tomates fritos, conservas de atún y mejillones, queso fresco, pan de molde y patatas fritas.
Por el contrario, el aumento en el contenido de sal se ha incrementado en platos preparados de carnes y pescados, sucedáneos de angulas, fuet, jamón cocido, pero es en bollería y galletas donde el incremento ha sido brutal con un aumento del ¡118%!
También ha sido aumentado el contenido de sal en el pan, producto de consumo cotidiano y que supone la mitad de la ingesta de sal diaria (2,2 gramos) y a pesar de que se había llegado a un acuerdo entre fabricantes y Administración para su reducción , se ha producido un incremento del 16% desde el 2006.
La OCU aconseja volver a la preparación de la comida casera y disminuir en nuestra dieta los alimentos procesados, así como sustituir parte de la sal por otros ingredientes como ajo, limón, hierbas aromáticas o especias.
Si nos es difícil prescindir de lo alimentos procesados debemos de mirar en la información nutricional que marcas son aquellas que tiene menos cantidad de sal, y si en esta información no aparece, sino que se muestra el contenido en sodio, recordad que simplemente multiplicando ese dato por 2,5 obtendremos el contenido de gramos de sal en ese alimento.
Y es que según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la cantidad media recomendada de sal al día es de 5 gramos para la población en general, pero los españoles tomamos el doble, 10 gramos de sal de media, de los cuales, el 75% viene de los alimentos procesados. Así que volvamos a la comida casera donde seamos nosotros los que añadamos con moderación la sal.
Vía | OCU Imágenes | Garitzko | Portal Abras En Directo al Paladar | La sal ¿tan mala cómo parece? En Directo al Paladar | La importancia de reducir el consumo de sal en la dieta
Ver 2 comentarios