Como dijo el famoso torero Rafael Gómez El gallo, "Hay gente pa tó", pero el caso de Rob Rhinehart, el hombre que decidió que ya no iba a comer más sino que simplemente iba a nutrirse, me parece un caso de los más extremos que he oído nunca.
Hace unos días, me enteré de esta noticia a través de la cuenta de twitter de Alfonso López y desde que lo leí, no he dejado de darle vueltas a por qué hará la gente este tipo de cosas. Insisto en que hay gente pa tó. Os cuento la historia de este hombre, un programador informático, blogger, de Atlanta, en los Estados Unidos. No tiene desperdicio.
No termino de entender por qué alguien querría dejar de comer y sustituir los ricos alimentos que tenemos disponibles, por los nutrientes equivalentes a los mismos. Este programador americano nos lo cuenta en su blog, con todo lujo de detalles.
Razones para no comer
Rob considera que los alimentos son el combustible que necesita su cuerpo para funcionar pero no quiere pan, sino hidratos de carbono, no quiere fruta, sino minerales y vitaminas, ni quiere un filete, un pescado o marisco, sino los aminoácidos que contienen.
Así tras un estudio de las diferentes posibilidades, decidió crear una sustancia, a la que denominó Soylent Green, en homenaje a una película de ciencia ficción. Esta sustancia, es una especie de papilla de color naranja pálido y aspecto turbio, en la que incluye todo lo necesario para alimentar su cuerpo.
El dice que comer algo cocinado, es algo divertido pero no algo necesario. Es como ir al cine, algo que le gusta pero que no quiere hacer tres veces al día durante toda la vida. Por eso prefiere alimentarse solamente con su papilla con los nutrientes necesarios y, sólo en ocasiones especiales, citas, reuniones etc., y sólo entonces, admite comer en restaurantes o en casas particulares la comida cocinada habitual.
Características de su papilla de nutrientes
Entre otras ventajas de esa forma de alimentarse, lo que ingiere Rob Rhinehart está libre de toxinas, aditivos, sustancias potencialmente cancerígenas y está calculado para contener todo lo necesario para hacerse una dieta absolutamente completa y equilibrada.
Además, su batido o papilla, resulta más barato que la comida normal, ya que el coste mensual de esta alimentación no llega a los 50 euros por persona según nos cuenta. La dieta contiene muchas menos calorías de las que consumía antes por lo que encima, Rob se ha librado de su sobrepeso.
Ya no tiene que fregar cacerolas ni sartenes, ni preocuparse de comprar alimentos perecederos, por lo que su forma de comer se ha simplificado muchísimo. Eso sí, todos los días come lo mismo, y aunque dice que no se ha aburrido aún del sabor de su papilla, no creo que aguante mucho tiempo ingiriendo siempre su Soylent Green.
En todo caso, el americano ha hecho los deberes y se ha estado haciendo análisis y pruebas médicas durante el proceso, y ha ido evolucionando la fórmula de su batido para hacerla más adecuada a sus necesidades. Además según cuenta, su forma física e incluso su piel han mejorado mucho por lo que está encantado con su experimento. Aquí podéis ver cuál es el contenido de su batido.
Por su parte, la comunidad médica y científica está también interesada en él, ya que además de lo interesante de este tipo de alimentación para acabar con el hambre en el mundo o para producir menos deshechos, puede ser muy útil para alimentar a viajeros de larga duración como serían los futuros astronautas que viajen a Marte, por poner un ejemplo.
De momento, y más aún si miro las fotos y me doy cuenta de lo que se está perdiendo, no tengo ningún interés en este tipo de experimentos como el de Rob Rhinehart, el hombre que decidió no comer más sino simplemente nutrirse y me parecen, a priori, un error tremendo.
¿Por qué limitarnos el placer de comer? ¿Por qué renunciar a la variedad, a los diferentes sabores y matices de los distintos alimentos? No sé qué os parecerá a vosotros, pero espero que este experimento no se convierta en una dieta de moda y no lo veamos pronto convertido en algún tipo de patología o trastorno de la alimentación. Hay gente pa tó.
Vía | Vice.com En Directo al Paladar | La peor dieta del mundo. La dieta de la cafetería En Directo al Paladar | Slow Carb. La dieta milagro de Tim Ferriss bajo la lupa
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