Técnicas GTD aplicadas a la cocina

Técnicas GTD aplicadas a la cocina
1 comentario Facebook Twitter Flipboard E-mail

A la hora de cocinar, poner en práctica algunas técnicas, nos puede ahorrar algo de tiempo e incluso dinero. Desde hace tiempo que en el terreno del productividad personal, existe una técnica llamada GTD, Get Things Done (se podría traducir como acabar las cosas). Su aplicación directa al mundo de la cocina o alimentación no es posible, pero sí que algunas de sus técnicas nos pueden ayudar, no ya solo a ahorrar tiempo, sino también y lo que es más importante, a comer mejor. En el post de hoy quiero compartir algunas de esas ideas con vosotros, y por supuesto, animaros a que compartáis con el resto de lectores de DAP, las técnicas que utilizáis vosotros.

Las listas

Si hay algo que caracteriza a la cocina son las listas o las notas. Listas de la compra, recetarios, etc... Dentro de las listas, un elemento que considero fundamental en una cocina es una pizarra cerca de la nevera. Con una pizarra podemos ir escribiendo directamente los productos que necesitamos comprar a medida que se van acabando. Más tarde, cuando vayamos a comprar, no hace falta escribirlo todo en una nota, basta con usar la cámara de nuestro móvil para hacer una foto.

Por supuesto, siempre podemos usar un bloc de notas, pero la ventaja de la pizarra es que siempre está a la vista, y todos pueden colaborar apuntando lo que hay que comprar.

Almacenar la información

Algo principal es las técnicas de GTD es tener un mecanismo para almacenar la información. Habitualmente en la cocina esto significa tener un recetario. Sin embargo, las nuevas tecnologías nos ofrecen alternativas más completas. Por ejemplo, Evernote. Lo que veis más abajo es una captura de mi bloc de notas digital, Evernote, con una muestra de mi recetario virtual.

Evernote

Mis notas de recetas en Evernote

¿Qué ventajas tiene frente a un bloc en papel? Pues que lo puedes llevar siempre contigo para capturar la información que te interesa en cualquier momento y con cualquier dispositivo. Por ejemplo, si tienes un smartphone, es posible hacer una foto a una receta que hayáis visto en un periódico o revista y automáticamente ya la tendréis en vuestra libreta. Otro ejemplo, también podréis capturar todas las recetas de DAP o de vuestras webs favoritas de cocina en la misma libreta. No solo la dirección web, sino el texto completo con las fotos. ¿Práctico no?

Pero ahí no acaban las ventajas. Con Evernote, también podréis buscar la información en cualquier momento y cualquier lugar. Es posible que en un recetario tengáis algo sobre jengibre, pero os puede costar mucho encontrarlo. Con esta herramienta, basta con que lo busquéis la palabra, y os sacará todas las notas sobre el tema.

Si queréis saber más sobre esta magnífica herramienta os recomiendo leer este post sobre evernote, para recordarlo todo en la nube.

Planificación

Decía un general que una vez entras en acción los planes son inútiles, pero que la planificación previa es esencial. Algo que nos puede ayudar mucho, no solo a ahorrar tiempo, sino a comer mejor es tener pensado qué vamos a comer durante la semana. Es muy sencillo hacer un cuadro con los días de la semana y las comidas, e ir rellenando cada uno de ellos, con nuestros platos. Por supuesto, esto también nos puede ayudar mucho a la hora de hacer la compra. De los propios platos de la tabla, nos salen casi directamente los ingredientes que necesitamos.

Esta técnica, además, nos ayuda mucho a ver si lo que estamos comiendo está proporcionado. Nos permite ver si una semana nos hemos pasado con la carne, o si no hemos comido nada de pescado. Además, el tiempo invertido en hacerla, se recupera con creces cuando ya sabes cada día lo que vas a preparar y cuando tienes los ingredientes comprados.

Muchas veces, tiramos de cosas "fáciles" y no muy saludables, simplemente porque no tenemos tiempo para pensar. Además, son diversos los estudios que demuestran que ser consciente y apuntar lo que uno come puede contribuir a perder peso.

La ejecución

Listas, notas y planes están muy bien, pero si no se llevan a la práctica no sirven. En cuanto a las técnicas de cocina no soy yo el más indicado porque hay grandes chefs y cocineros de los que podemos aprender. En mi caso, y supongo que como tantos otros, aprendí viendo los programas de Karlos Arguiñano y lo que siempre intento hacer es tener tanto los ingredientes, como las herramientas que voy a necesitar, preparados de antemano. De esta forma, también reduces estrés a la hora de ponerte a cocinar.

Eso sí, aunque tengas listas, notas y planes, deja un espacio para la improvisación. Es imposible saber si tendrás visitas, te pondrás enfermo, o lo que sea. Lo bueno de usar estas técnicas es que siempre tendrás a tu disposición un fuente de información de la que tirar cuando no sepas qué comer.

Por supuesto, también me gustaría saber que técnicas, herramientas o métodos utilizáis vosotros a la hora de cocinar, ¿lo comentamos?

Imagen | Por iwfx, Por Eduardo Deboni

En Directo al Paladar | Técnicas básicas de cocina : Cocinando huevos (I) En Directo al Paladar | Técnicas básicas de cocina : Cocinando huevos (II)

Comentarios cerrados
Inicio