Me declaro fan total de los chutney, son versátiles, combinan con muchos más platos de los que creemos, y encima se pueden tener envasados para utilizar cuando queramos. Así que hoy os propongo un original chutney de ratatouille ideal para acompañar cualquier carne.
Una vez preparado, y como sale bastante cantidad, lo he envasado como si de una mermelada se tratara, así trabajo un día y disfruto varios tomando esta excelente y deliciosa guarnición. Aunque por supuesto podéis dividir los ingredientes de la receta a la mitad y hacer menos chutney.
Comenzaremos cortando las hortalizas, el pimiento, el calabacín y la berenjena en trozos del mismo tamaño. Seguidamente picamos la cebolla y las manzanas, así como lavamos y pelamos los tomates cortando su carne sin semillas en trozos iguales.
Ponemos todo en una olla de fondo grueso y le añadimos el vinagre, dos cucharaditas de sal, la mostaza y el pimentón. Llevamos toda la mezcla a ebullición.
Cuando las hortalizas hiervan, bajamos el fuego y las dejamos cocer durante media hora hasta que estén tiernas. Añadimos el azúcar moreno y revolvemos hasta que se disuelva, dejamos cocer otros diez minutos y ya está listo nuestro chutney para utilizar o para envasar en conserva.
Con qué acompañar el chutney
El chutney de ratatouille os servirá como una práctica guarnición para acompañar casi cualquier carne o pescado. Me parece una forma original y distinta de incluir verduras en nuestra dieta, además así aprovechamos esas hortalizas que muchas veces rondan en la nevera de otras preparaciones porque podemos ajustar las cantidades a nuestros gustos personales.
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