Descripción

Terras Gauda Etiqueta Negra es uno de los vinos más especiales de la bodega que ha definido un estilo propio a la hora de entender el potencial de guarda de los blancos gallegos. En él se busca la armonía entre el carácter afrutado de la Albariño, Caíño blanco y Loureiro, y la sutileza del roble francés. El Albariño aporta sus aromas afrutados y una sensación de volumen en boca, el Loureiro proporciona intensidad aromática floral y la Caíño blanco es responsable de su gran estructura y singularidad.

Ficha técnica

La bodega
Tipo
Blanco Fermentado en Barrica
Añada
2018
Grado
13.0% vol.
Producción
20.258 botellas
Subzona
O Rosal
Variedad
70% Albariño, 22% Caíño blanco, 8% Loureiro
Otros formatos disponibles:
Origen
Rías Baixas

Cata

Vista
Color amarillo dorado.
Nariz
Muestra un recorrido aromático singular; comienza exhibiendo una notable potencia frutal donde se perfilan aromas de piel de naranja y melocotón muy maduro, enlazados con delicadas notas de flor de manzanilla. De forma complementaria y en un escalón olfativo inferior, gravitan ligeros recuerdos especiados de anís estrellado. Simultáneamente y en annonía, nos muestra el suave aporte aromático del roble francés que acrecienta su complejidad, con apuntes de pan tostado, crema pastelera y nuez moscada.
Boca
Impresiona por la sincronía entre una gran potencia y estructura y su vibrante frescura gracias a una magnífica acidez frutal. Es elegante y opulento a la vez, resultando un vino sedoso, envolvente y untuoso. Gracias a su interminable final regresamos a las sensaciones frutales, florales y al aporte tostado de las exquisitas maderas.
Temperatura de servicio
Entre 9 y 12 ºC.
Consumo
Puede evolucionar de forma positiva en botella durante al menos 5 años más.
Maridaje
Pescados al horno, carnes blancas, arroces, foie gras.

Viñedo y elaboración

Descripción
La Albariño y la Caíño blanco proceden de las parcelas con menor altitud, mayor humedad y más cálidas. La Loureiro procede de viñedos situados a mayor altitud y menor humedad, más frescos.
Clima
Atlántico. La primavera de 2018 resultó lluviosa con temperaturas mínimas bajas que se mantuvieron durante el primer tercio del verano. En agosto se produjo un notable incremento de las temperaturas, reflejado en dos golpes de calor a principios y mediados de mes, registrando en el primero la máxima más alta de los últimos veinte años. Estas condiciones incidieron en la deshidratación de la uva en las zonas más expuestas, mermando el peso final de la cosecha. Gracias a un septiembre soleado y seco, se escalonó la vendimia que se prolongó más de lo habitual consiguiendo una excelente maduración de todas las variedades y obteniendo unos vinos con finales muy largos, equilibrados y complejos.
Cosecha
El Albariño se vendimió entre el 18 y 22 de septiembre, el Loureiro entre el 26 y 27 y el Caiño entre el 28 y el 30.
Vinificación
Una vez obtenidos los mostos se deciden los porcentajes idóneos para componer la mezcla que fermentó en fudres y barricas de roble francés nuevo, de uno y de dos usos.
Envejecimiento
Tras las fermentaciones alcohólica y maloláctica comenzó una lenta crianza sobre lías con tres battonages semanales en las barricas y dos en los fudres. El vino permaneció durante 5 meses en contacto con las lías en las barricas y 8 meses en los fudres para terminar de afinarse gracias a su reposo en frío en el depósito.
Embotellado
A finales del verano de 2019.