Estar casada con un guiri supone, en muchas ocasiones, una batalla gastronómica que no me lleva más que a perder cada vez que entramos en ella. Nuestro país cuenta con platos deliciosos de dificil apreciación para quienes no han crecido con ellos. Por mucho que la gastronomía española esté en plena expansión, hay recetas muy nuestras que los guiris siguen sin atreverse a comer.
Escribo esto con conocimiento de causa. No sólo por lo que a mi marido concierne, sino por lo que veo y vivo cuando nos visita la familia. Se pirrian por nuestro tapeo, arroces, embutidos, potajes y muchos otros platos tradicionales. Pero no les propongas probar ciertos alimentos porque salen corriendo, entre ellos estas siete recetas "muy nuestras" que no se atreven a comer los guiris.
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Siete recetas muy nuestras que no se atreven a comer los guiris ( 7 fotos)
Zarajos
Los zarajos son los intestinos marinados del cordero lechal enrollados en un sarmiento. Se fríen, asan o cuecen a la plancha hasta que quedan dorados. Son típicos de Cuenca, aunque es fácil encontrarlos en el resto de Castilla-La Mancha.
Callos
Otro plato de casquería, típico Madrid. Muy sabroso pero poco atractivo para los guiris quienes no tardarán en rechazarlo al enterarse de que, esos trozos gelatinosos a los que acompañan el chorizo, la morcilla y, en algunos casos, los garbanzos, son estómago de vaca. Aunque, lo mismo cambian de idea después de mojar un poco de pan en su deliciosa salsa.
Caracoles
El consumo de caracoles se remonta siglos atrás y está muy extendido por toda España. Cada región tiene su forma de prepararlos, así como sus tradiciones. Generalmente se asocian a festividades locales, aunque hay restaurantes que los sirven como platos de lujo. Otros países, como Francia o Italia, también son consumidores de caracoles.
Sesos
Los sesos más populares en España son los de cordero y los de ternera. Están deliciosos en buñuelos, rebozados y fritos, y son altamente nutritivos. Aunque dudo que a ningún guiri le motive esto último.
Criadillas
Mejor no preguntar antes de probar. Y es que una vez enterados de que las criadillas son los textículos del toro, lo mismo ni se atreven a olerlos. Aunque, como dicen que "de lo que se come, se cría"...¡lo mismo cambian de idea!
Percebes
Una delicatessen que se vende a precio de oro y que cualquier guiri estará encantado de ahorrarse en favor de cualquier otro bocado más visual. Y es que, por muy sabrosos que sean, el aspecto de estos crustáceos no es el más atrayente. Consecuentemente, pocos son los valientes que se animan a probarlos. Una pena, pero ¡ellos se lo pierden!
Conejo
Muchos son los guiris que no probarán el conejo jamás. No por su aspecto, como ocurre con los platos anteriores, sino porque en el Reino Unido los conejos son animales domésticos. Podríamos decir que a nosotros nos ocurriría lo mismo si nos ofrecieran un plato de perro asado. Argggg.
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