Cómo hacer ambientadores caseros para que tu casa huela de maravilla con productos naturales

Estos tienen la ventaja de que te permiten jugar con los aromas que deseas para tus espacios y que son completamente naturales, ideales para alérgicos y hogares con niños y mascotas

Joana Costa

Editor

Mantener un aroma agradable en casa no requiere necesariamente de productos industriales ni aerosoles cargados de químicos. De hecho, muchos de ellos solo enmascaran los olores sin eliminarlos del todo y pueden contener compuestos que irritan las vías respiratorias o provocan alergias.

Frente a esto, los ambientadores caseros elaborados con ingredientes naturales se presentan como una alternativa mucho más saludable, sostenible y respetuosa con el entorno.

Además de ser más seguros para toda la familia —mascotas incluidas—, estos ambientadores naturales permiten personalizar la fragancia según tus preferencias, mezclando aceites esenciales, hierbas aromáticas o frutas cítricas.

Y no solo eso: suelen ser más económicos a largo plazo, fáciles de preparar y perfectos para quienes buscan mantener su hogar fresco sin renunciar al bienestar ni a un toque de creatividad.

Índice de Contenidos (6)

1. ¿Qué son los ambientadores caseros?

Los ambientadores caseros son mezclas preparadas con ingredientes naturales —como hierbas, frutas, aceites esenciales o especias— que desprenden aromas agradables en el hogar.

A diferencia de muchos ambientadores comerciales, no contienen productos sintéticos, lo que los convierte en una excelente opción si buscas un estilo de vida más natural o si tienes alergias, mascotas o niños pequeños.

Se pueden presentar en distintos formatos: sprays, frascos con palitos de bambú, bolsitas aromáticas, velas, o incluso en ollas a fuego lento. Lo mejor de todo es que puedes adaptarlos a tus gustos y necesidades.

2. Tres recetas para hacer ambientadores caseros naturales

2.1 Ambientador casero de limón y romero

Una forma sencilla de elaborar un ambientador casero con limón y romero consiste en mezclar cáscaras de limón y ramas frescas de romero con un poco de alcohol en un frasco de vidrio. Deja que los ingredientes maceren durante unos días y conseguirás una fragancia natural y duradera para cualquier estancia del hogar.

Otra alternativa es preparar una infusión aromática: hierve en una olla agua con rodajas de limón, ramitas de romero y, si lo deseas, añade canela o clavo para intensificar el aroma.

También puedes conservarlo en un frasco en la nevera y calentarlo cuando quieras refrescar el ambiente. Este ambientador es perfecto para eliminar olores persistentes en la cocina.

2.2 Ambientador casero de aceite esencial de lavanda y bicarbonato

Para preparar un ambientador casero con aceite de lavanda y bicarbonato, solo necesitas un recipiente pequeño con tapa perforada, bicarbonato de sodio y unas gotas de aceite esencial de lavanda. Mezcla ambos ingredientes en el recipiente hasta que se integren bien.

Coloca la mezcla en la zona que desees perfumar: el bicarbonato actuará como neutralizador de malos olores, mientras que la lavanda aportará un aroma fresco y relajante. Agita de vez en cuando para mantener la intensidad del perfume.

Este tipo de ambientador es ideal para habitaciones, baños o armarios, ya que además de perfumar, ayuda a absorber la humedad y malos olores.

2.3 Ambientador casero de naranja, clavo y canela

Para crear un ambientador natural con un toque cálido y festivo, solo necesitas cáscaras de naranja, una cucharadita de clavos de olor, una ramita de canela y agua. Coloca todos los ingredientes en una olla con agua y caliéntalos a fuego lento durante unos 30 minutos. A medida que el líquido se evapora, el vapor esparce un agradable aroma por todo el hogar.

Esta combinación es ideal para los meses fríos o épocas como el otoño y la Navidad, ya que su fragancia especiada y reconfortante crea una atmósfera acogedora. Además, al usar ingredientes naturales, es una alternativa saludable y decorativa para aromatizar cualquier estancia.

También se puede poner sal en un vaso, añadir unos clavos de olor y unas ramas de canal. Se le puede dar un toque cítrico con unas gotas de naranja. Este remedio es ideal para tener en la encimera o en el salón y contar con una fragancia persistente y duradera.

3. Otros ambientadores caseros

Además de las recetas anteriores, existen muchas otras opciones para perfumar tu hogar naturalmente:

Bolsitas aromáticas: rellena pequeñas bolsas de tela con flores secas (como lavanda o rosas), cáscaras de cítricos secas o hierbas. Colócalas en cajones o armarios.

Spray casero: mezcla agua destilada, alcohol y aceites esenciales en un frasco con atomizador para rociar en telas o en el aire.

Velas aromáticas naturales: si sabes hacer velas, puedes añadir aceites esenciales y especias naturales para crear velas personalizadas y perfumadas.

Difusores con palitos: mezcla aceites esenciales con un aceite portador (como almendra o jojoba) en un frasco de cuello estrecho. Introduce palitos de bambú para difundir el aroma lentamente.

Usar ambientadores caseros no solo mejora el olor de tu casa, sino que también puede convertirse en una actividad creativa y relajante, estupenda para el verano. Prueba estas recetas, combina tus aromas favoritos y disfruta de un ambiente fresco, saludable y personalizado cada día.

Foto | Karen Laårk Boshoff y Amar Preciado

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