La planta que perfuma la casa y mantiene alejados a los mosquitos: por qué todo el mundo la pide en primavera

Joana Costa

Editor

Primavera es sinónimo de ventanas abiertas, brisa fresca y mosquitos que entran como si hubieras mandado invitación. En esta guerra silenciosa contra los insectos, muchos buscan velas, enchufes o espráis. Pero a veces, la solución no está tan lejos: se encuentra en una maceta.

Una planta decorativa, que además perfuma sutilmente el ambiente, y espanta a los insectos con la elegancia de quien no necesita insecticida. Suena demasiado bien para ser verdad, pero la naturaleza tiene sus trucos. Y esta planta es uno de ellos.

No se trata de una especie rara ni exótica. De hecho, se encuentra en viveros, supermercados y balcones de media Europa. Tampoco es el descubrimiento de la sopa de ajo: la citronela verdadera, también conocida como geranio citronela, y su popularidad no es flor de un día.

Olor cítrico

Lo que distingue a esta planta no es su aspecto, sino el aceite esencial que desprende. El olor cítrico, muy agradable para humanos, resulta irritante para mosquitos y otros insectos voladores. Una defensa natural, sin aparatos ni químicos.

Pero no todo es tan simple. Tener una citronela en casa no garantiza un escudo impenetrable. Su eficacia depende de la ventilación del espacio y del tamaño del área que se desea proteger. No sustituye una mosquitera, pero ayuda.

Además, hay que distinguir entre la citronela auténtica (Cymbopogon) y otros geranios aromáticos que imitan su fragancia. Ambos funcionan, pero con intensidad distinta. Para un efecto máximo, conviene elegir variedades bien identificadas.

Buena luz y riego moderado

Su cuidado no exige gran experiencia: prefiere luz directa, riego moderado y no tolera bien el exceso de agua. En maceta, conviene usar sustrato ligero y aireado para evitar pudriciones. En climas templados puede mantenerse todo el año.

Colocada cerca de entradas, balcones o zonas de descanso, la citronela actúa como barrera olfativa. Su olor puede intensificarse al frotar las hojas, liberando más aceite esencial. También se usa como base para velas y aceites naturales.

Entre sus ventajas, destaca su doble función: decora y protege. Entre los inconvenientes, su eficacia depende de la cantidad de plantas y la persistencia del olor, que se disipa rápido en espacios abiertos.

No es la planta milagro que erradicará todos los mosquitos, pero es una aliada útil, estética y sin efectos secundarios. Una buena elección para quienes buscan armonía entre naturaleza y funcionalidad.

Foto | Pixabay y Satheesh Cholakkal

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