Dejar el café puede ayudarte a dormir mejor, pero también puede provocar pesadillas. Literalmente

El café es una bebida muy saludable con numerosas propiedades para la salud, el problema es que no siempre sienta igual de bien a todo el mundo. Dejar de tomar cafeína puede ayudar a quien tenga problemas de ansiedad, manchas en los dientes, indigestiones y reflujo, un ritmo cardíaco elevado o problemas para conciliar el sueño. Pero aunque te duermas antes, puede que te despiertes con algún sobresalto.

Es un fenómeno que experimenta mucha gente que ha dejado de tomar café o cafeína: de pronto recuerdan más lo que sueñan, y son sueños muy vívidos. Incluso olvidando lo que han soñado a los pocos minutos de despertarse, se les queda la sensación de haber pasado una noche agitada. También es frecuente tener pesadillas o sentir desasosiego al volver a la vigilia.

Pero si ingerimos cafeína, la señal de la adenonisa se bloquea y no llega al cerebro. Aunque la cafeína actúa normalmente entre las tres y seis horas después de tomarla, una parte se queda en el organismo, y continúa bloqueando esa señal química. Por eso mucha gente no duerme bien si toma café o té por la tarde, afectando tanto a la hora de conciliar el sueño, como en la calidad de ese descanso.

¿Por qué dejar la cafeína puede provocar sueños intensos? Como explican en la BBC, dormimos más horas seguidas, lo que aumenta la cantidad de sueño REM. En esta fase el cerebro está muy activo mientras descansa el cuerpo, y es el momento más propicio para generar sueños vívidos, con emociones intensas. Despertar durante una fase REM hace que recordemos más intensamente lo que hemos soñado, como si fuera una experiencia sensorial real, que suele vincularse también con las pesadillas.

Aunque faltan evidencias más sólidas que certifiquen esta relación entre dejar la cafeína y la capacidad para soñar más y más intensamente, los últimos estudios parecen confirmar esta asociación. En cualquier caso, es un fenómeno que se produce, sobre todo, durante las primeras semanas al dejar la cafeína, como otros efectos secundarios tales como dolores de cabeza.

Si tomas mucho café o mucha cafeína de otras fuentes y quieres disminuirla o cortar por lo sano, es más recomendable hacer una disminución del consumo gradual para que el organismo se vaya habituando.

Imágenes | Unsplash/Jeremy Yap - Freepik/teksomolika

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