El autodenominado “rey del hígado”, que aseguró durante años alimentarse solo a base de carne cruda, ha sido detenido por amenazas al podcaster Joe Rogan
Su nombre es Brian Johnson, pero se hace llamar a así mismo como “el rey del hígado” (Liver King). No porque tenga un órgano fuerte, sino porque lleva años presumiendo de llevar lo que llama un “estilo de vida natural” y “ancestral”, basado en comer carne y vísceras crudas, como, defiende, hacían nuestros antepasados para sobrevivir. Su particular filosofía le ha granjeado una lucrativa legión de seguidores, pero también de enemigos que ponen en duda lo que enseña en las redes.
La semana pasada su nombre saltó a los titulares cuando fue arrestado en Austin, Texas, donde acudió con el firme propósito de enfrentarse a Joe Rogan, un popular podcaster residente en dicha localidad. Johson había estado amenazando a Rogan a través de las redes sociales, aunque las razones de su altercado no están del todo claras. A Johnson, que ya está puesto en libertad, se le acusa de haber emprendido amenazas terroristas contra el podcaster, pero no parece preocupado por los cargos. El propio “rey del hígado” ha publicado en su Instagram el momento del arresto, con su esposa presente, al salir del hotel Four Seasons de Austin.
Es solo la última guinda de una larga historia esperpéntica protagonizada por un personaje que lleva años cautivando a seguidores de todo el mundo. Fans y haters, fascinados y asqueados a la vez por su estilo de vida, su morbosa dieta, su rudo aspecto físico y el carisma tan particular que irradia en sus publicaciones. Un carisma que ha sabido monetizar muy bien.
Cómo vender un "estilo de vida natural" y sacar tajada
En las numerosas entrevistas que Johson ha dado a lo largo de su carrera de influencer, suele repetir cómo la pérdida de su padre cuando era un bebé le marcó de por vida. A falta de una figura paterna, cuenta que pasó su infancia admirando a su hermano mayor, a quien describe como "más alto y popular", quien solo consiguió hacerle sentir más débil y pequeño, afectando gravemente a su autoestima. Esto le llevó a empezar a machacarse en el gimnasio siendo aún muy joven, pasando prácticamente todo el tiempo libre que tenía al salir de clase practicando ejercicio.
Ya de adulto, el cambio de vida más radical vendría tras nacer sus dos hijos, Rad y Stryker Johnson, que llegaron al mundo con problemas de salud, muy debilitados tras el parte. Así, Johson se propuso indagar en cómo lograr que su familia sea fuera más fuerte, encontrando la inspiración que necesitaba en los métodos de Mark Sisson, divulgador de fitness, atleta y defensor de un modo de vida "ancestral".
Brian Johson se dio cuenta de que tenía que volver a vivir como nuestros antepasados, haciendo lo mismo que ellos para sobrevivir en la naturaleza, comiendo básicamente carne cruda, órganos y huevos sin cocinar, huyendo de la comida mínimamente procesada y practicando mucho, muchísimo ejercicio a diario. Una rutina que han adoptado su esposa y sus hijos, a los cuales no ha dudado en mostrar también comiendo incluso testículos crudos en los vídeos de sus redes sociales.
Al crecer sus seguidores en YouTube, Instagram y, más tarde, TikTok, lanzó su propia empresa de productos y suplementos supuestamente saludables, Ancestral Supplements, basados en compuestos de carne, vísceras y derivados cárnicos, y también empezó a compartir "recetas" y exageradas rutinas de ejercicio para sus fans.
La caída del rey
Sus discutibles métodos fueron también muy criticados por seguidores y otros creadores de contenidos que cuestionaban el modo de vida de Johson, acusándole de mostrar una vida irreal delante de las cámaras. Aunque siempre negó haber recurrido a esteroides u otros suplementos, en noviembre de 2022 se filtraron correos electrónicos con análisis de sangre que demostraban que estaba usando Omnitrope, una hormona de crecimiento.
Johnson hizo un vídeo admitiendo el uso de drogas y disculpándose con sus seguidores. Considerado un fraude y un vendehumos, el rey del hígado trató de lidiar con su pérdida de credibilidad -y clientes- a través del documental Untold: The King of the Liver, donde confiesa que ha cambiado su dieta, incluyendo ahora frutas y verduras, eso sí, que él mismo cultiva en su casa, siguiendo ese "modo de vida ancestral", pero desde una nueva perspectiva menos radical.
Desde su desenmascaramiento, Johson no ha vuelto a ser el mismo influencer de éxito de antaño, pero sigue muy activo en redes sociales y procura generar contenidos para sus fans, trolls y curiosos ocasionales. La reciente trifulca con Rogan le ha dado más vidilla a su cuenta, pues no deja de ser exhibicionismo mediático, sin que las autoridades tengan muy claro por qué ha emprendido amenazas contra el podcaster, quien afirma que jamás ha interactuado con él.
Fotos | @liverking
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