El papel pintado vinílico puede ser la clave para conseguir un cambio rápido, limpio y con estilo
Durante años, el baño fue territorio exclusivo del azulejo y el esmalte blanco, como si cualquier otro material supusiera una herejía higiénica. Pero los tiempos cambian, y con ellos, la decoración.
Hoy, el papel pintado ha llegado también a los baños, desafiando la humedad y demostrando que el diseño puede convivir perfectamente con el vapor. La creadora @mimodemami lo demuestra en un vídeo donde transforma su baño sin obras, solo con papel pintado vinílico y algunos trucos básicos.
El resultado: un espacio mucho más cálido y moderno, sin perder funcionalidad. El secreto está en elegir bien el tipo de papel. Los vinílicos son resistentes a la humedad y lavables.
Apto para principiantes
Esto convierte los baños en una opción ideal para paredes alejadas de la zona de ducha o lavabo. Además, su instalación es rápida y apenas requiere experiencia previa. Es apta para personas no entendidas en la materia.
Antes de colocarlo, conviene rellenar las juntas entre azulejos y alisar la superficie. De ese modo se evita que el relieve se marque con el tiempo. Un toque final de esmalte para azulejos en las zonas más expuestas al agua asegura una mayor durabilidad.
El resultado es un baño que cambia por completo de estilo sin pasar por reformas. Con motivos florales, geométricos o tipo mármol, los nuevos papeles pintados aportan un toque decorativo y personal que ningún azulejo logra por sí solo.
Se trata de una solución sencilla y económica que convierte un baño corriente en un espacio con encanto. Lo mejor llega cuando uno se cansa del diseño: en este caso bastará con despegarlo y empezar de nuevo.
Foto | Montaje
En DAP | La planta que tu baño necesita para olvidar el moho y la humedad
Ver todos los comentarios en https://www.directoalpaladar.com
VER Comentarios