Vino, canela, azúcar y limón. Solo cuatro ingredientes se necesitan para preparar la bebida riojana más refrestante: zurracapote. Recuerda a la sangría, pero lo cierto es que éste tiene personalidad propia. Eso sí, ambas son bebidas perfectas para disfrutar en buena compañía.
Buscando su origen llegamos a la localidad riojana de Calahorra. Una de sus seis peñas, la Peña Philips, es la que se otorga la creación de esta bebida que se empezó a tomar para acompañar los dulces tradicionales de Semana Santa. No obstante, en la actualidad está presente en todas las fiestas del año.
Aunque hoy en día existen muchas versiones del zurracapote, yo he seguido la de la Academia Riojana de Gastronomía. Es una receta sencillísima de seguir y preparar. Os animo a hacerla lo antes posible. Veréis qué cosa más rica y más refrescante para estos días de calor.
Esta es una elaboración muy sencilla que solo requiere de un poco de planificación porque es importante enfriar bien la bebida antes de consumirla. Empezamos hirviendo el azúcar y el agua, con una rama de canela, en un cacito durante 15 minutos a fuego suave.
Tenemos que obtener un almíbar ligero que mezclamos con el vino en una jarra o en un bol amplio. Retiramos la canela y removemos para que ambos ingredientes se integren bien. A continuación agregamos el zumo de medio limón, pasándolo por un colador para que no caigan pipas.
Guardamos el zurracapote en la nevera durante 48 horas, que macere y se amalgamen todos los sabores antes de consumir. Servimos en un vaso con mucho hielo y con trozos de fruta de temporada: naranja, melocotón, fresas,...al gusto.
Con qué acompañar el zucarrapote
Aunque esta es una receta muy de verano, lo cierto es que se puede preparar en cualquier momento del año. Eso sí, cuando hace calor entra sin sentir, así que cuidado con ello porque pasarse es sencillísimo. Os recomiendo que seáis moderados con el consumo y lo hagáis acompañando la bebida con algo de comida. ¡Disfrutad!
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