Aunque Chris Buetti es ingeniero de datos, una de las profesiones mejor pagadas de la actualidad, no podía permitirse muchos lujos después de abonar el descomunal alquiler de un apartamento en Nueva York. Así que, ni corto ni perezoso, decidió usar sus conocimientos para logar comer gratis en los restaurantes de la Gran Manzana. ¿Cómo? Creando una cuenta de Instagram artificial, que funciona de forma totalmente automática.
La cuenta (@beautiful.newyorkcity) comparte automáticamente imágenes icónicas de Nueva York: rascacielos, monumentos, parques… De todo. Y en menos de un año –empezó con todo esto en verano de 2018– ha logrado tener 29.700 seguidores, cifra más que suficiente para comer gratis en algunos lugares de Nueva York a cambio de un post.
“Escribo a los restaurantes de la zona a través de los mensajes directos de Instagram o el correo electrónico y ofrezco publicar una crítica positiva a cambio de una comida gratuita o al menos un descuento”, explica el propio Buetti en un artículo para Medium en el que ha explicado con todo lujo de detalles la jugada. “Casi todos los restaurantes a los que he escrito me han respondido ofreciéndome una comida o una tarjeta de regalo. La mayoría de los lugares tienen un presupuesto de marketing asignado para este tipo de cosas, por lo que estaban felices de ofrecerme una comida gratuita a cambio de una promoción. Terminé dando algunas de estas comidas a mis amigos y familiares porque a veces tenía demasiadas acumuladas”.
El único trabajo que Buetti realiza para recibir las comidas gratis consiste en publicar los post sobre los restaurantes que visita. El resto de la cuenta está 100 % automatizada. Es algo que se nota a la legua: por cada comida hay una decena fotos de rascacielos sacadas de otras cuentas de Instagram.
No importa, ni siquiera hace falta ocultar que la cuenta es un robot: si tienes los suficientes seguidores comes gratis. En su post en Medium el ingeniero no revela el nombre de la cuenta, pero lo hizo solo unas semanas después en una entrevista con BuzzFeed.
Un manual para comer por la cara
Buetti explica con todo detalle cómo ha creado su exitosa cuenta. Pero, sin entrar en los aspectos más técnicos (que cualquiera puede consultar en su post), lo que ha hecho el ingeniero es crear una automatización robótica de procesos (más conocida como RPA, por sus siglas en inglés) que encuentra fotos de Nueva York en otras cuentas de Instagram y las pública en la cuenta citando la fuente y agregando hashtags.
El robot también elimina comentarios considerados spam, sigue a usuarios, da “me gusta” a publicaciones de terceros, monitoriza la bandeja de entrada y, lo que Buetti considera más importante, escribe a través de mensajes directos o correos electrónicos a los restaurantes para pedir comidas gratis.
“Desde su inicio, ni siquiera he iniciado sesión en la cuenta”, presume el ingeniero. “No gasto ningún tiempo en ello. Es esencialmente un robot que opera como un humano, pero el espectador promedio no puede notar la diferencia. Y como programador, me siento y admiro su (y mi) trabajo”.
Una cuenta que sirve de aprendizaje
Como ha explicado Buetti a BuzzFeed su querida cuenta de Instagram no solo le está sirviendo para comer gratis, además es un estupendo escaparate de sus labores como programador. Desde su creación, el ingeniero ha fundado una consultora, Social Rise Consultig, que ofrece a sus clientes herramientas similares para que crezcan sus seguidores y, por tanto, su influencia.
El ingeniero no tiene ningún dilema moral respecto a su cuenta pues, en su opinión, no hay ninguna razón por la que un influencer tenga que ser una persona. “Pasé mucho tiempo y esfuerzo escribiendo el script”, explica Buetti en BuzzFeed. “Les estoy ofreciendo un servicio y me están ofreciendo una comida gratis”. Al final, argumenta Buetti, una publicación de una cuenta automatizada vale tanto para un anunciante como una de una cuenta administrada por un ser humano.
El ingeniero tampoco tiene reparo con el hecho de que, exceptuando las instantáneas de las comidas, todas las fotos estén cogidas de otras cuentas, algo que en el fondo es bastante habitual en Instagram.
Buetti, que desde hace un mes trabaja para la NBA (según se puede ver su perfil de LinkedIn), ha reconocido a BuzzFeed que va a dejar de utilizar la cuenta para comer gratis, pues ya ni si quiera le merece la pena. “Prefiero hacer algo donde pueda ver cómo aumentan los dólares en mi cuenta bancaria”, concluye. La jugada, en cualquier caso, le ha salido de miedo.
Imágenes | Pixabay/Chris Buetti