Además de ser un chef "televisivo" bastante conocido en Gran Bretaña y haber publicado un par de libros bastante vendidos, Jamie Oliver se ha anotado un punto en su lucha contra la comida rápida. Su campaña se ha centrado en la comida de los colegios, buscando que ésta sea lo más sana posible, y la primera afectada parace ser que ha sido la empresa de catering Canterbury Foods, que ha tenido que cerrar varias plantas.
La relación entre los cierres y la campaña de Jamie Oliver es indirecta, como se han apresurado a indicar desde el entorno del cocinero, pero indirecta o no, la relación existe.
Vía | La Voz de Galicia En Directo al Paladar | Oido cocina: Jamie Oliver crea escuela