Si algo ha cambiado en los últimos años en nuestra forma de hacer la compra es la creciente conciencia medioambiental. En medio de un panorama en el que el futuro sostenible se ha convertido en toda una prioridad, los clientes demandan cada vez más opciones de consumo más responsables.
El papel de las empresas de supermercados es fundamental en la transición hacia un modelo de economía circular. Comprometidos con este propósito y, conscientes de las inquietudes medioambientales de los consumidores, Mercadona ha decidido dar un paso más allá con una estrategia completamente pensada para asegurar un futuro más sostenible. Un plan de lo más ambicioso, que dará lugar a un nuevo modelo de punto de venta, en el que el reciclaje y la reducción de plásticos serán la clave.
La Estrategia 6.25: seis acciones y un compromiso sostenible
Una fecha en el horizonte, 2025, es la que se ha marcado la compañía valenciana como límite para un triple objetivo: reducir el uso de plásticos hasta en un 25%, hacer que todos sus envases de plástico sean reciclables y conseguir que se recicle correctamente todo su residuo plástico.
El Sistema de Gestión Ambiental de Mercadona, que ha sido pionero en la toma de decisiones de carácter sostenible, se lanza ahora hacia una estrategia integral. Un plan que no solo compromete a tiendas y empleados a cuidar más del planeta, sino que invita también a los clientes —o ‘jefes’, como les gusta llamarlos en Mercadona— a llevar a cabo prácticas más sostenibles.
Porque la sostenibilidad no es una cuestión que resulte novedosa para Mercadona. Si bien en 2019 la empresa optó por sustituir sus bolsas de plástico de un solo uso por alternativas de papel reciclado y rafia reutilizable, sus acciones por la protección del medio ambiente van mucho más allá.
El uso del pool de envases reutilizables para la fruta —en marcha desde hace 25 años—, la gestión de residuos de cartón y plástico o su apuesta por el transporte sostenible son solo algunas de las decisiones estratégicas con las que Mercadona ha dicho sí a la protección del planeta. La nueva Estrategia 6.25, con una inversión de 140 millones de euros, supone el principio de un gran cambio que se sustenta en seis puntos clave.
1. Adiós para siempre a las bolsas de un solo uso en 2020
Aunque Mercadona lleva más de un año sin ofrecer bolsas de un solo uso en la zona de cajas, el auténtico avance llega con la Estrategia 6.25. Las bolsas compostables serán, a partir de ahora, la alternativa ecológica perfecta para seleccionar los frescos más habituales, como frutas, verduras, pescados y carnes. Una opción ideal para transportar nuestros productos hasta la caja, mantener su calidad en óptimas condiciones y utilizar bolsas para la compra sin remordimientos.
2. No más utensilios de plástico desechables
Los vasos, platos y cubiertos de plástico son muy habituales en nuestra cesta de la compra, sobre todo cuando se acerca algún evento importante. Mercadona, como parte de la Estrategia 6.25, ha decidido cambiar este tipo de productos por opciones reutilizables. Perfectos para cuidar el medio ambiente y para transmitir los valores a los más peques cuando se acercan cumpleaños y celebraciones.
3. Menos plástico
Seguro que en más de una ocasión te has planteado por qué razón se incorpora un envoltorio de plástico a envases que ya son herméticos. Un caso muy claro son las conservas y encurtidos que se compran en botes de vidrio, pero también ocurre con bricks y botellas. Mercadona ha decidido prescindir de todo el plástico que no añada valor o que no sea necesario para garantizar la seguridad alimentaria, a fin de que el contenedor amarillo de nuestras cocinas se llene de la forma más lenta posible.
4. Hacia un futuro cercano con el 100% de los envases reciclables
Botellas, bricks, latas… Son muchos los formatos que ofrece Mercadona que nos permiten llevar nuestros alimentos favoritos a casa. La cuarta acción de la Estrategia 6.25 establece que todos los envases de marca propia del supermercado van a ser completamente reciclables, lo que facilitará que su plástico (si se recicla correctamente) se convierta en una nueva materia prima, lista para usar en otro tipo de envase.
5. Los residuos de las tiendas, también con una nueva vida
Una medida en la que no suele pensar el consumidor, pero que es fundamental para que los supermercados se involucren en la protección del medio ambiente. El plástico que cubre las mercancías de producto o los residuos que se generan en el día a día de los supermercados necesitan también una gestión correcta y eficiente. Esa es la razón que ha llevado a Mercadona a colocar contenedores para cada tipo de productos, con la finalidad de que la separación de residuos se haga desde los propios establecimientos.
6. Aprendiendo a reciclar en casa
El compromiso de Mercadona con la Estrategia 6.25 no se ciñe a las paredes del supermercado, sino que las traspasa. Para ello, facilita a los ‘jefes’ (o clientes) la información sobre los procesos de separación y reciclado de cada producto de la tienda. Si echamos un vistazo al reverso de los envases, veremos que todos contienen información clara para saber en qué contenedor depositarlos una vez los utilicemos. Esto es de gran ayuda para casos como los bricks, el algodón o el cartón impreso, que siempre generan muchas confusiones.
Desde el supermercado hasta tu casa: hacia el cambio en los hábitos de consumo
En la protección del medio ambiente, es importante que todos hagamos nuestra aportación y seamos más responsables que nunca con nuestros hábitos. Con la Estrategia 6.25, Mercadona tiene en cuenta su papel divulgador de cara a los consumidores.
Como ya hemos visto, la información clara a través de las etiquetas va a ser de vital importancia para una correcta gestión de los residuos. También lo es la nueva sección de su web, ‘Cuidemos el Planeta’, donde los usuarios encontrarán consejos para unos hábitos de vida más sostenibles y podrán leer la respuesta a muchas de sus dudas sobre los productos de Mercadona, como la razón por la que el pepino holandés se vende envasado.
Un plan de formación que Mercadona traslada desde su supermercado hasta el entorno online y que, además, ya ha tomado forma con un innovador modelo de tienda (la tienda 6.25) que está en todas las provincias y en Portugal. Aunque la compañía se ha encargado de formar a sus 90.000 empleados para que la nueva estrategia sea un éxito, la transformación de las tiendas se hará de forma periódica. Por el momento, solo se abrirá una tienda piloto por provincia, empezando por Valencia, que servirá como laboratorio de pruebas para subsanar posibles inconvenientes.
Un cambio sustancial que comenzará de forma gradual, pero que sube la apuesta de Mercadona por el medioambiente. Todo un gesto para decir "sí" a la salud de nuestro planeta.
Imágenes | Mercadona
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