Todos los trucos (y alguna receta) para clavar tus cenas veraniegas

Todos los trucos (y alguna receta) para clavar tus cenas veraniegas
Sin comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail
wbct

Webedia Brand Services

Expertos en Branded Content

Las altas temperaturas del verano nos llevan a cambiar de hábitos, también en la cocina. Con el calor nadie tiene ganas de pasarse horas delante de los fogones y solo apetecen platos ligeros sin complicaciones, sobre todo a la hora de la cena. Pero eso no quiere decir que tengamos que repetir cada día las mismas recetas aburridas de siempre.

Para hacer frente a las calurosas noches veraniegas lo mejor es apostar por platos refrescantes que nos aseguren una digestión ligera, y que sean vistosos y apetecibles. Por suerte, la naturaleza es sabia y nos regala muchos productos de temporada ideales para sacarles partido a nuestras cenas de verano, ¿sabes cuáles son los mejores?

Verduras y hortalizas

Verduras en Parrillada

Deben ser la base de nuestra dieta todo el año, también en verano. La buena noticia es que en estos meses muchas verduras están en su mejor momento, y eso quiere decir que disfrutaremos del máximo sabor. Judías verdes, calabacín, berenjena, zanahoria, lechugas... y sin olvidar las hortalizas clásicas del gazpacho. Por fin los tomates saben de verdad a tomate.

Las verduras tienen muy pocas calorías, apenas contienen grasa y son ricas en fibra y agua. Se digieren fácilmente y no dan sensación de pesadez, algo que siempre hay que evitar por las noches. Además son muy versátiles; podemos hacer salteados, tortillas, ensaladas, parrilladas o cremas frías, y también son estupendas como relleno de bocadillos, tostas y pizzas.

Un vistazo a…
Cinco recetas de verano fáciles y rápidas

Frutas de verano

Fruta

En cuanto se asoma el verano los mercados rebosan del colorido de las frutas de temporada. Melón, sandía, melocotón, cerezas, paraguayas, higos, nectarinas, uvas... son nuestras mejores aliadas para refrescarnos gracias a su alto poder hidratante, y con su rico colorido son apetecibles a cualquier hora.

La fruta es el mejor postre de verano, naturalmente dulce y saludable, pero también podemos añadirlas a platos salados para que sean mucho más frescos y cargados de vitaminas. Por ejemplo, en un gazpacho de sandía, una ensalada con melón y uva o cocinando unas brochetas de melocotón y queso, ya sea en la plancha o en parrilla.

Pescados y mariscos

Mariscos

El verano es sinónimo de playa, pero aunque estemos en la ciudad podemos llevar el sabor del mar a nuestras cenas con los pescados y mariscos típicos de esta época. Aportan proteínas de alta calidad y se digieren mucho mejor que las carnes, se cocinan más rápidamente y son muy bajos en grasas.

El marisco cocido y las conservas marineras son un recurso sencillo para enriquecer cualquier plato, y podemos marinar los pescados con aliños cítricos en frío para no tener que encender el fuego. Y si tenemos la suerte de tener una barbacoa en la terraza, las noches veraniegas piden compartir parrillada de sardinas en buena compañía.

Para que veas lo fácil que es montar un menú completo veraniego de lujo que no te pesará en la cena aquí tienes tres recetas con las que empezar a inspirarte en la cocina. Están extraídas del nuevo libro de Martín Berasategui publicado por Grijalbo, 'Ensaladas para todo el año y otros platos deliciosos', en el que encontrarás muchas más ideas para triunfar con tus cenas, en verano y durante todo el año. ¡Ve cogiendo el delantal!

Langostinos con guacamole

Langostinos con guacamole

Ingredientes

  • 2 aguacates muy maduros, 1 tomate, 1 pizca de cebolleta picada, 5 cucharadas de aceite de oliva virgen extra, 1 pizca de ralladura de limón verde, zumo de 1 limón verde, 1 pizca de cilantro fresco, 1 pizca de salsa de soja y salsa Worcestershire, 12 langostinos frescos.

Elaboración

  1. Partir los aguacates y retirarles los huesos. Con una cuchara, sacar la pulpa y volcarla a un bol. Guardar intactos los medios aguacates vacíos que emplearemos en la presentación. Pelar el tomate, partirlo en dos, despepitarlo y picarlo en dados pequeños, que añadimos al aguacate.

  2. Con las púas de un tenedor, aplastar la pulpa hasta dejarla rota, con algunos trozos irregulares. Añadir la cebolleta picada, el aceite, la ralladura, el zumo, el cilantro picado, la salsa de soja y la Worcestershire. Rectificar para dejar el guacamole al gusto y refrescarlo en la nevera.

  3. Retirar las cabezas a los langostinos. Pelar las colas, dejando el extremo intacto. Con ayuda de un cuchillo bien afilado hacerles una incisión en su parte trasera para eliminar el intestino. Sazonar cabezas y colas.

  4. Poner al fuego una sartén con una pizca de aceite y saltear las cabezas. Tostarlas unos 2 minutos por cada lado, para que se les infitre el calor. Añadir una pizca más de aceite y agregar las colas que tostaremos 1 minuto por cada lado, teniendo cuidado para que no se sequen. Retirarlas.

Acabado y presentación

Colocar sobre una bandeja o platos los cuatro medios aguacates vacíos. Rellenarlos con el guacamole bien fresco. En el extremo de cada aguacate, apoyar las cabezas de langostino salteadas, y sobre el conjunto situar las colas de langostinos salteadas. Rociar con una pizca de aceite de oliva crudo y servir.

Ensalada de tomate con bacalao

Ensalada de tomate con bacalao

Ingredientes

  • 4 tomates bien maduros, 4 cebolletas tiernas, 1 lomo de bacalao desalado de unos 200 g, 1 limón verde, 1 cucharadita de salsa de soja, 4 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen, 1 pizca de pimienta molida.

Elaboración

  1. Pelamos las cebolletas, las partimos en dos longitudinalmente y las cortamos a lo largo. Han de ser tiras bien finas. Las sumergimos en un bol con agua y hielo durante 5 minutos, para que el frío las retuerza. Ganan vistosidad y quedan más tiesas y crocantes.

  2. Pelamos los tomates con ayuda de un cuchillo bien afilado. Los partimos en dos y luego en medias rodajas bien gruesas.

  3. Asegurarse de que el lomo de bacalao no tenga espinas centrales. Con ayuda de un cuchillo de filetear bien afilado vamos obteniendo escalopes de bacalao bien finos, deslizando el cuchillo sobre la carne e intentando que al llegar al final queden separados de la piel.

  4. Extendemos los escalopes sobre una bandeja, los pimentamos y los rociamos con el zumo y la ralladura obtenidos del limón verde, la salsa de soja y dos cucharadas de aceite de oliva. Dejamos así el pescado en la nevera al menos 20 minutos.

Acabado y presentación

Aliñamos el tomate y las cebolletas escurridas del agua con una pizca de sal, muy poca, y las dos cucharadas restantes de aceite de oliva virgen. Rescatamos el pescado del frío, le damos unas vueltas para que se empape bien del aliño y lo acomodamos en una fuente, cuidadosamente e intentando que quede con volumen. Entre las lascas de pescado intercalamos las rodajas de tomate. Sobre el tomate y el bacalao repartimos las tiras de cebolleta aliñadas. Para terminar rallamos sobre el conjunto una pizca más de limón verde.

Sopa de melón y menta

Sopa de melón

Ingredientes

  • 1 melón, 1 puñado de menta.

Elaboración

  1. Partir el melón en dos longitudinalmente. Quitar con ayuda de una cuchara sopera las semillas del interior, y con ayuda de un cuchillo afilado retirar la cáscara. Hay que eliminar todas las partes blanquecinas de esta última, para no dar a a sopa un tono amargo y desagradable.

  2. Cortar el melón en pedazos de tamaño medio, reservando unos cuantos trozos cortados con más cuidado y de un tamaño más regular: los usaremos como guarnición sumergiéndolos en la sopa fresca.

  3. Limpiar la menta en abundante agua fría y escurrirla.

  4. Juntar en un bol las hojas de menta y la pulpa de melón, salvo los tacos reservados como guarnición, e introducir el brazo de una batidora accionando la máxima potencia durante 30 segundos. Colar la sopa y refrescarla en la nevera pues ha de servirse helada, bien fría.

Acabado y presentación

Si queremos servir la sopa como postre, no tendremos más que añadir una cantidad razonable de almíbar o de azúcar. Si observamos que la sopa queda muy espesa podemos añadir una pizca de agua, hasta que quede con una densidad agradable. De todas formas, si hacemos la sopa en plena temporada del melón, en verano, estará lo suficientemente dulce y jugoso como para que no sea necesario añadir ningún endulzante.

Fotos | iStock.com - sugar0607 - shironosov - inaquim - DronG - oooby

Comentarios cerrados
Inicio