Seguramente nuestra alimentación sería sin lugar a dudas más rica y variada si nuestra economía fuera acorde. Nuestro poder adquisitivo impera sobre la alimentación que podemos tener y el encarecimiento de muchos productos puede representar realizar una dieta algo más precaria.
La calidad alimentaria depende de nuestra economía, este es un hecho constatado por la mayoría de los consumidores. Dependiendo de los miembros de la familia que trabajen y aporten un sueldo, la alimentación será mucho más satisfactoria. Muchos de los alimentos que se consideran muy adecuados para realizar una dieta sana y equilibrada tienen un precio excesivo que impide la accesibilidad a muchas personas. Nos pregonan la necesidad de realizar una buena dieta y sin embargo nos encontramos con esta traba, altos precios. Se habla de una creciente obesidad en toda Europa y se alecciona sobre la manera de atajar este problema pero, no se facilitan todos los medios adecuados, tan sólo los informativos. De esta manera, el problema va a persistir.
Hoy por hoy, los productos más asequibles para la economía de muchos siguen siendo los que propician la obesidad, los que proporcionan un aporte extra de distintas grasas que no son recomendables para nuestra salud.
Creemos que todas las campañas informativas son muy adecuadas e importantes, pero también creemos que se debe realizar algún tipo de actuación para que los productos saludables puedan ser asequibles para la economía de todas las familias españolas, ¿tú que opinas?
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