En muchas casas, el fregadero se convierte en uno de los puntos más problemáticos en cuanto a organización. Las tareas de limpieza diarias, como los platos, utensilios y demás, terminan generando una acumulación de objetos que dificulta mantener el espacio ordenado.
Y si tenemos en cuenta que todos tenemos botes y frascos de diferentes tamaños para productos de limpieza o artículos de uso cotidiano, la tarea de organizar puede volverse aún más difícil debido a ese caos. Pero en medio de esta heterogeneidad, esos botes que normalmente tiramos podrían tener una segunda vida muy útil.
Reutilizarlos para otros fines puede ser una forma sencilla y práctica de mantener el fregadero más ordenado que nunca, además de ser una solución sostenible. Así lo propone Soledad Jones, de la cuenta de Tik Tok @locaporelorden.
Recortar y listo
Además, estos botes, generalmente fabricados con plástico resistente, tienen una forma que permite apilarlos o guardarlos en espacios pequeños. Si eres de los que tienden a acumular pequeños objetos, como pinzas, esponjas o incluso productos de limpieza a medio usar, estos botes pueden convertirse en una opción perfecta para almacenarlos sin que se vea desorden.
Tan solo necesitas limpiar bien el bote antes de reutilizarlo y decorarlo un poco, si lo deseas, para que quede más estético y se ajuste a la decoración de tu hogar. Para hacer este portaesponjas tan solo hay que recortar la base inferior del bote de champú o de acondicionador.
Puedes jugar un poco con la altura, para que el porta esponjas tenga más gracia. Después, tendrás que hacer dos agujeros en la base para que el agua de la esponja se escurra y no se quede estancada en el fondo.
Así evitarás la acumulación del agua y de malos olores, consiguiendo que el estropajo se seque. Basta con una mano de pintura para customizarlo, aunque quitarle la etiqueta suele ser suficiente.
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♬ Monkeys Spinning Monkeys - Kevin MacLeod & Kevin The Monkey
Uno de los principales beneficios de reutilizar estos botes es la economía circular. Aparte de que no necesitas invertir en soluciones de almacenaje costosas, estás ayudando a reducir la cantidad de plásticos que terminan en el medio ambiente. En realidad, si cada uno reutilizara al menos un frasco o bote al mes, el impacto positivo sería considerable y se dejaría sentir.
Además, estos botes no ocupan mucho espacio, por lo que incluso en cocinas o baños pequeños, pueden ser la solución perfecta para mantener el orden sin sacrificar el espacio.
Foto | Ron Lach
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