Así es el “increíble lugar”, según José Andrés, para desayunar y comer en Barcelona con una “capipota súper rica”

Parece que José Andrés no puede dejar de ponerse nuevos retos más allá de sus múltiples restaurantes y las labores solidarias que coordina en World Central Kitchen. Ahora acaba de poner en marca un proyecto virtual junto con su equipo llamado 'The Chef's List Map', "el mapa de la lista del chef", donde compartir de forma colaborativa los mejores sitios para comer y beber en todo el mundo.

La idea es crear una “lista de bolsillo del mundo” y rellenar poco a poco el mapa de los cinco continentes con todo tipo de sitios recomendados por el chef y su equipo, con conocimiento de causa, para que cualquier persona que viaje por el mundo tenga referencias fiables donde ir a comer a cualquier hora o, como dice el cocinero, “vivir experiencias”.

En realidad es una especie de wikimapa para el que espera contar con la colaboración de cualquier apasionado de la buena comida, con la confianza que tendrías en un buen amigo que ha descubierto un sitio que vale la pena de verdad. Para poder participar, eso sí, hay que demostrar primero, por correo, que tienes buen gusto y que el proyecto te interesa. Y además pagar por la suscripción exclusiva.

Pero como aperitivo a esta lista, José Andrés nos ha adelantado algunos de sus sitios favoritos del mundo y ha escogido uno de sus locales preferidos de España, concretamente en Barcelona, ciudad a la que está tan unido y conoce bien desde sus inicios entre fogones.

Se trata del bar restaurante Granja Elena, que podríamos definir más bien como una casa de comidas renovada tanto por el local en sí como por el espíritu de su cocina y de su carta.

Como describe José Andrés, Granja Elena empezó su historia en los años 70 como una tienda de ultramarinos de las de antes, un negocio familiar donde podías ir a hacer la compra de los mejores ingredientes locales de productores artesanos, y después de comprar podías quedarte a tomar algo.

Tres generaciones han pasado por el negocio adaptándose a los tiempos cambiantes, y ahora es un acogedor restaurante con alma de bar de barrio en el que el chef Borja Sierra mantiene la máxima de emplear materia prima de primera calidad para presentar una carta basada en la cocina tradicional, con muchas referencias catalanas y donde los platos de cuchara tienen un especial protagonismo.

Para José Andrés, es “un increíble lugar para desayunar y comer”, donde destaca referencias infalibles como jamón ibérico, croquetas, la tortilla de bacalao y una capipota “súper rica y sorprendente”. Granja Elena tiene un Sol Repsol y sus propietarios definen su propuesta como 'alta cocina de barrio', con un gran amor por tratar con refinamiento las legumbres, la casquería y los guisos.