Está claro que de tanto trabajar con ellas, los diseñadores le hemos cogido cariño a las pantoneras --aunque a veces las quemaríamos en la hoguera-- y es normal que acaben saliendo proyectos como Beertone, la guía Pantone para cerveceros, o Choctone, la pantonera de los chocolates. Hoy os traigo una pantonera para comérsela.
Inspirada por el color de algunos platos, la artista Alison Anselot decidió crear esta serie de fotografías en las que cada plato representa uno de los tonos de la conocida guía de colores. Menos el azul, están casi todos.
Seguro que muchos habéis tenido un deja vú con las tartas Pantone de Emilie Guelpa, quizás por la delicadeza en su ejecución, ya que ambas series son realmente preciosas.
De esta me encanta lo acertados que están los colores, y que no se ha limitado simplemente en buscar ingredientes que tuvieran el tono adecuado (naranjas, plátanos, manzanas...) sino que ha elaborado un plato para cada caso, como un risotto para el amarillo, un tartar de salmón para el naranja o un brownie para el marrón.
Menos mal que las pantoneras de verdad no vienen representadas así, porque seguro que más de una vez me entraría el apetito y acabaría mordisqueando los tarjetones o tratando de mojarlos en un vaso de leche, porque hay colores realmente apetecibles.
Vía | Fubiz En Directo al Paladar | Las inspiradoras ilustraciones gastronómicas de Gattobravo
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