De vez en cuando no me apetece cenar de plato de cocina y es cuando recurro a picoteo del bueno como con este sandwich danés de encurtidos lleno de sabor, pero muy ligero. Realmente no es un sandwich al uso, si no una deliciosa rebanada de pan negro integral de centeno con vegetales muy típica del norte de Europa.
Si os gustan los encurtidos y sabores agridulces no dejéis de probar este bocadito para la cena o un aperitivo. Estoy segura que os conquistará tanto como a mí, que desde que lo he descubierto lo repito muy a menudo.
Comenzaremos combinando la cebolla roja con el vinagre en un bol y dejándola macerar durante 20 minutos. Mientras tanto extender una capa fina de mantequilla en cada rebanada de pan y por encima una capa de mayonesa.
Colocar la remolacha cocida cortada en láminas, los rabanitos también cortados, los huevos duros cortados en cuartos, la cebolla encurtida y unos daditos de pepinillo en vinagre. Sazonar con sal y pimienta al gusto. Espolvorear con eneldo fresco si os gusta o bien darle un toque fresco con unas hojas de rúcula como he hecho yo.
Con que acompañar el sandwich danés de encurtidos
Este sandwich danés de encurtidos, resulta ideal para tomar solo como entrante. Podéis añadirle unos brotes tiernos de alguna variedad que os guste y disfrutarlo acompañando una bebida tipo vermut.