Se llama Sesén Room y se anuncia como el primer bar o specialty coffee de colágeno de Europa. Acaba de abrir sus puertas en pleno centro de la modernez madrileña, el barrio de Chamberí, donde las cafeterías de especialidad y los clónicos place to be [sic] brotan a velocidad de vértigo. Pero lo que Sesén vende, dicen, es "bienestar", que traducido al lenguaje mundano es su catálogo de bebidas y suplementos con colágeno. Un colágeno que no sirve para nada.
La moda del colágeno como remedio mágico para casi todo lleva ya años entre nosotros, en forma de suplementos, cremas, lociones y algunos alimentos enriquecidos. Se promocionan como remedio antienvejecimiento o incluso rejuvenecedor, para fortalecer los huesos, desarrollar músculo y reducir arrugas y ganar elasticidad. La teoría parecía buena, pero bastan unos conocimientos básicos de ciencia para desmontar su narrativa milagrosa.
Por qué no sirve de nada ingerir colagéno
El colágeno es una proteína, o familia de proteínas, que produce el propio organismo, y que se encuentra ampliamente repartida por todo el cuerpo, fundamentalmente tendones, huesos y piel. Pero con el tiempo se va perdiendo, y esto tiene diversos efectos en el organismo, muchos de ellos visibles, como el envejecimiento prematuro de la piel o fragilidad en los huesos.
Esta pérdida se puede evitar y ralentizar, pero el remedio no es comer o beber colágeno tal cual, ni embadurnarse con él. No existe evidencia científica probada que estos suplementos o productos tengan efectos positivos, y por tanto la EFSA no permite ninguna alegación de salud en estos suplementos.
Como suele decirse en los círculos de expertos y divulgadores, como ha recordado recientemente Gemma del Caño, ingerir colágeno para fabricar colágeno sería como si un calvo comiera pelos para perder la calvicie. Suena absurdo, pero es un ejemplo bastante ilustrativo.
Grosso modo, el colágeno que podamos ingerir con suplementos no se absorbe como tal. El cuerpo lo degrada en aminoácidos que usará en la fabricación de otras proteínas. Además, el colágeno como tal es de escasa calidad menos interesante a nivel nutricional los alimentos proteicos.
Lo que sí podemos hacer es estimular la síntesis de colágeno de forma natural en nuestro organismo, a través de la ingesta de otros alimentos. Y básicamente, como siempre, con un estilo de vida saludable, practicando ejercicio regularmente y manteniendo una dieta sana, variada y equilibrada.
Un bar de colágeno para posar en redes sociales si te sobra el dinero
La filosofía que promueve Sesén, la marca mexicana original madre del nuevo concepto de café-bar-museo de colágeno, es más que loable: fomentar la vida sana y el bienestar. Las herramientas para ello, ya son más cuestionables.
Si bien la firma avisa de que sus productos no hacen milagros, y que deben estar integrados en el conjunto de un estilo de vida saludable, siempre aparecen sus suplementos de colágeno como partes imprescindibles de la ecuación para alcanzar ese bienestar.
Tras desembarcar en Europa primero con sus productos, muy populares entre influencers y el famoseo internacional, abrirían en Madrid el primer espacio que también servía de punto de venta físico. Ahora, con el renovado Sesén Room, se busca más imitar el estilo de las cafeterías de especialidad urbanas, modernas e instagrameables, algo que queda perfectamente claro en su estilo minimalista y un menú sin sorpresas donde no faltan las tostas de aguacate, el pan de masa madre y smoothies con superalimentos. Y con colágeno, claro.
En definitiva, otra apertura de postureo más para la capital donde se cobrará el café a precio de sangre de unicornio para los fans de la marca y su fundadora. Cada uno es libre de gastarse el sueldo donde guste, pero si buscas estimular el colágeno de tu organismo, mejor cómete una tortilla de espinacas y una naranja entera de postre.
Fotos | HowToGym - David Fanuel - Sensén
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