Liliana Fuchs
EditorCon el hervidero de hamburgueserías que es Madrid ya tiene su mérito lograr hacerse con un nombre en el sector en poco tiempo. La cadena Pink's tiene a su favor el haberse especializado en un segmento muy concreto, el de la smash burger, y el haber ido de menos a más. En apenas unos años ha pasado de un minúsculo local de 20 m² a lanzarse ahora a conquistar el norte del país.
En pleno boom de los negocios de hamburguesas gourmet con recetas absurdamente recargadas buscando captar a influencers, sus fundadores apostaron desde el principio por especializarse en una única hamburguesa con locales modestos y el mínimo de complementos en carta. Comenzaron con su pequeña cocina en pleno barrio de Chueca de Madrid donde solo preparaban 200 unidades al día para llevar, y, tres años después, ya van camino de las 17 aperturas.
Sus restaurantes han crecido en dimensiones, pero mantienen el concepto original: abiertos 365 días al año, con una sola hamburguesa smash en su carta, de la que siguen preparando 200 unidades al día, tanto para tomar en el local como para llevar. Tras expandirse por la propia capital, Pink's ha cambiado de estrategia llegando a los barrios y localidades de la periferia, y ahora dan el salto a otras comunidades.
Con 16 establecimientos en Madrid, Pink's se expande abriendo en Galicia y Asturias, contando ya con un local en A Coruña y cuatro más ya confirmados en Gijón, Oviedo, Vigo y Santiago de Compostela, que abrirán muy pronto, aunque todavía sin fechas confirmadas.
En DAP | Receta de hamburguesa
