Gracias a un enólogo se pueden obtener buenos vinos, sin la labor que éstos ejercen, sin duda perderíamos mucha calidad en los vinos que hoy en día nos ofrecen las grandes y pequeñas bodegas.
Un enólogo se encarga de realizar el seguimiento del proceso desde la maduración de la uva hasta el embotellado del vino, visita frecuentemente la explotación para tener cura de ella. Este profesional tiene conocimientos de marketing, conoce tanto la oferta como la demanda, conoce y aplica los nuevos avances tecnológicos para conseguir un producto óptimo.
Controla todos los aspectos de las uvas y del vino, sea acidez, azúcar, aromas o taninos. El enólogo aconseja al viticultor, facilitándole la información necesaria en concordancia al terreno de producción, a la economía (inversión), etc., para que el vino resultante sea satisfactorio. Es importante un correcto engranaje entre el viticultor y el enólogo para producir buenos vinos, el enólogo debe mejorar la materia prima con la que el viticultor trabajará. Muchos de los buenos vinos que podemos disfrutar, han sido logrados gracias a un inestimable aporte del enólogo.
Cada día se da más importancia al trabajo que el enólogo realiza y su figura se ve ensalzada a lo más alto, y es que su trabajo lo podemos apreciar a través del sabor que el vino nos confiere.
Más información | Noticias. Com (Entrevista al enólogo Alberto Antonini)