Hace tiempo que la gama de turrones por Navidad dejó de limitarse al duro y al blando. Más allá de las variedades algo estrambóticas de distintas marcas comerciales, cada vez hay una mayor apuesta por productos innovadores de sello gourmet, como demuestra el nuevo turrón de Gin Tonic creado por Albert Adrià para Torrons Vicens.
Fue el año pasado cuando nació la gama Natura de esta antigua casa de turrones artesanos gracias a la colaboración con el chef Albert Adrià. Este año se suman tres nuevos sabores: el turrón de kikos, el turrón de quesos y el que pretende ser la gran estrella, el turrón de Gin Tonic.
La gama Albert Adrià Natura
Las grandes marcas llevan tiempo apostando por contar con la figura de reputados cocineros para promocionar sus productos, normalmente creando gamas especiales dentro de sus catálogos, aunque muchas veces se limitan a usar el nombre del personaje como forma de publicidad.
En el caso de Torrons Vicens y Albert Adrià se trata de una colaboración entre el chef y Ángel Velasco, maestro turronero de la casa catalana. Esta línea nació la temporada pasada como una colección de turrones exclusivos inspirados en los postres que el mismo autor elaboró para El Bulli, como por ejemplo el turrón Raíces o el Pisada Lunar.
Este año continúa la apuesta de la marca por potenciar la exclusividad de sus productos con tres nuevas variedades diseñadas por el equipo que lidera Adrià: turrón de kikos, de queso y de Gin Tonic. El primero está compuesto de un turrón de trufa de lima relleno de praliné de kikos y avellana, y el segundo es de chocolate amargo con praliné y queso de La Seu d'Urgell.
Estos tres turrones completan así la gama sumándose a los que lanzaron el año pasado: Barcelona, Frambuesa, Piña Colada, Raíces y Pisada Lunar. Algunos incorporan el navideño mazapán en sus ingredientes, aunque más que turrones para las fiestas se pueden contemplar como bombones de autor en forma de pastillas rectangulares aptos para todo el año.
¿Turrón con sabor a Gin Tonic?
No es la primera vez que vemos cómo un cóctel sirve de base para crear un postre o un producto gastronómico concreto, aunque reconozco que la idea de transformar el sabor del Gin Tonic en un turrón comestible me resultó, cuanto menos, extraña.
Combinados como la piña colada o bebidas alcohólicas como el ron tienen sabores muy marcados que son más fáciles de trasladar a un producto, pero el Gin Tonic es un cóctel más sutil con muchas variaciones de sabor dependiendo de la mezcla que se utilice.
En este caso se ha contado con la colaboración de Gin Mare, una ginebra que es apuesta particular del propio Adrià y que destaca por su destilación artesanal y el uso de botánicos mediterráneos como el tomillo o el romero.
¿Y cómo se consigue trasladar los matices del Gin Tonic a un turrón? La verdad es que la base parece lógica, el chocolate blanco, que al ser extremadamente dulce necesita contrastes ácidos y frescos para no ser demasiado empalagoso.
La creación de Adrià y Velasco incorpora zumo de lima, piel de limón confitada, trufa de ginebra Gin Mare y lo que llaman “fizzy”, que no son más que caramelos efervescentes para darle el toque carbónico típico de la tónica en un Gin Tonic.
Desgranando un poco más a fondo los ingredientes, este turrón está compuesto por un 69% de chocolate blanco y un 6,4% de ginebra Gin Mare, y suma además enebro, destilado de hierbas y aroma de quinina. Está certificado como producto libre de gluten apto para celíacos, pero los los intolerantes o alérgicos a lácteos y frutos secos deberán tener cuidado con su consumo.
Personalmente prefiero decir que este turrón está inspirado en el Gin Tonic en lugar de afirmar que tiene su sabor, aunque también reconozco que no soy una experta en este cóctel. Me gustó el contrapunto ácido afrutado de la lima y el limón, y los caramelos efervescentes añaden un toque crujiente sin que se note demasiado su efecto carbónico.
Yo no soy muy aficionada al chocolate blanco porque me empalaga demasiado, pero los más golosos seguro que disfrutarán probando este turrón. Me gustó mucho más otro de los nuevos sabores, el turrón de quesos, por tener más sabor a chocolate y una textura crujiente muy agradable.
El Turrón de Gin Tonic de Torrons Vicens se comercializa en pastillas de 300 g a un precio de 9,50€ en su tienda online, donde se pueden encontrar también el resto de turrones de la gama Natura. Lo cierto es que muy navideños no son, pero los mismos responsables quieren elevarlos a la categoría de producto gourmet para degustar durante todo el año.
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