Bea Orviz Tjiang
EditorCrujientes por fuera, con ese toque dulce y el queso fundido dentro. Las marquesitas son una comida callejera típica de Yucatán, en México. Empezaron siendo algo parecido a una crepe, aunque la masa no es igual, y resulta más parecida a la de un barquillo. Al cocinarla, se dora rápidamente y al enfriarse se vuelve rígida y crujiente. Se rellenan y se enrollan aún calientes para que conserven la forma cuando se enfrían.
La versión tradicional se rellena únicamente con queso de bola rallado (Edam). Con el tiempo fueron apareciendo muchas versiones nuevas, dulces, saladas o una mezcla de ambas. Gustan tanto que hoy ya no solo se encuentran en la calle. También las preparan en pastelerías y cafeterías.
Se hacen en una plancha especial, pero en casa se pueden preparar perfectamente con una sartén antiadherente. Los ingredientes son muy simples: harina, mantequilla, claras, azúcar, leche y un poco de vainilla. Con eso y un poco de práctica salen estupendas, sin necesidad de complicarse.
Esta vez preparé cinco tipos diferentes: una con solo queso, otra con queso y pavo, otra con plátano y Nutella, otra con dulce de leche y frambuesa, y la última con todo junto (plátano, dulce de leche, frambuesa y Nutella).
Para la masa, mezcla harina, azúcar glas, mantequilla derretida, dos claras de huevo, leche, una pizca de sal y un poco de vainilla.
Calienta una sartén antiadherente a fuego medio-alto y añade un poco de mantequilla. Cuando se derrita, pasa un trozo de papel de cocina para retirar el exceso. Luego vierte una porción de masa con una garcilla y mueve la sartén con la mano para que se extienda y forme una capa fina.
Es importante dejarla dorar bien por debajo antes de darle la vuelta, porque eso es lo que hace que quede crujiente. Cuando los bordes empiecen a despegarse, ya puedes girarla.
Después de tostarla por el otro lado, aprovecha la parte menos dorada para poner el relleno. El queso se derrite enseguida, y si añades algo dulce, se mezcla todo mientras sigue caliente. Enrolla rápido, porque en cuanto se enfría un poco se endurece y mantiene la forma.
Con qué acompañar las marquesitas
En Yucatán se suelen comer solas, recién hechas, directamente del carrito y aún calientes, pero en casa puedes acompañarlas con algo para completar el momento. Si las haces dulces, quedan muy bien con un café capuchino, un chocolate caliente o incluso un batido.
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