Cuando pienso que estoy curada de espantos y que no hay (casi) nada que pueda sorprenderme a nivel gastronómico, me topo con noticias como esta que me hacen dar cuenta de lo muy equivocada que estoy, pues parace que la solución para dietas pobres en sal podría ser un tenedor japonés.
Por supuesto, no es un cubierto normal y corriente, sino un tenedor eléctrico que han creado los investigadores del Laboratorio Rekimoto de la Universidad de Tokio. Si realmente funciona, podría ser la solución ideal para personas con hipertensión o retención de líquidos, qué pena que no sirva también para los que somos golosos ¿Queréis saber cómo funciona?
La lengua humana tiene áreas de sensibilidad relativa ante los distintos sabores, que son captados por las papilas gustativas. Lo que hace este tenedor eléctrico es dar pequeñas descargas en la lengua para estimular los sabores de un plato sin sal, engañando nuestro sentido del gusto para percibir los sabores salados.
A mí el planteamiento me parece estupendo, sobre todo si sirve para ayudar a mejorar nuestra salud. No sé si el tenedor en cuestión es regulable, pues no todos somos igualmente sensibles a los sabores, habiendo personas que son más "saladas" que otras, pero sobre todo me pregunto si la intensidad de la descarga puede llegar a ser tan intensa como para producir una quemadura ¿y si se lleva un piercing en la lengua? ¡Uf! Y a vosotros ¿qué os parece?
Vía | Esquire Foto | Eduardo Mueses En Directo al Paladar | La sal, ¿tan mala como parece?