Un cumpleaños infantil bien podría ser una celebración transversal en todo el mundo, o al menos en su lado occidental: velas, pasteles y regalitos, quizás alguna piñata y muchos niños corriendo sin ton ni son.
Ahora bien, en TikTok, la usuaria @carmeninuk ha desatado el debate sobre cómo es posible que un cumpleaños infantil termine sin tarta, sin regalos y con los padres recogiendo a toda prisa.
Según cuenta aparentemente después de una fiesta, así es como se celebran muchos cumpleaños en Reino Unido. Cero emoción, cero sorpresas, sobre todo en lo que para nosotros es el momento cumbre.
"Cantan cumpleaños feliz y se piran"
Como hecho diferencial de los aniversarios en España, los niños llegan puntuales, comen algo, juegan un poco y casi casi se van. Check. "Cantan cumpleaños feliz y se piran", dice.
Según esta expat, aunque trata de hacerlo a la española, los niños llegan sobre las 15 horas, y cenan a las 17 horas, y máximo a las 18.30 horas se canta el cumpleaños feliz y se desata la parte más desconcertante: "To take away".
Y el motivo es la fugacidad de sus días, que se terminan, de puertas para afuera al final de la tarde. Según relata, a esa hora todo el empieza a salir de casa y el pastel, que podría considerarse la parte central del evento, no se degusta en comunidad, sino que se pide, nada más y nada menos que embolsado, con servilleta y bolsita de plástico.
"Para llevar", dicen las familias que cogen a sus niños por el brazo para arrastrarlos a la vuelta a casa, aunque según la española alguna madre le haya confesado que la tarta se la toman en casa, "ya tranquilamente con su té".
El regalo, billetes
Esto hace además que no solo se lleven su ración: "Te piden para el marido, para la hermana pequeña y para ellas", expone la española visiblemente decepcionada. En cuanto al regalo, dejan una tarjeta al llegar "y dentro le ponen un billetito de dinerito", todo muy curioso.
Muchos usuarios españoles han comentado el vídeo con incredulidad, y otros apelando a la adaptación cultural. "No entiendo cómo ha llegado la sociedad de allí a ser así. Qué frío todo", dice uno, mientras que otro remite al dicho allí dónde fueras, haz lo que vieras.
Otros destacan el mezquino gesto de no abrir los regalos delante de los invitados como gesto de mala educación. "Fui a una casa de intercambio, le llevamos aceite y un mantón de Sevilla [...] y guardó el paquete", explica una.
De forma más realista señala que en España ya nadie come tarta, sino que se soplan las velas y se va preguntando a todo el mundo si quiere tarta, y nadie quiere y "casi siempre se tira".
Foto | @carmeninuk/Tik Tok