Castillo, cuevas, iglesias… El sorprendente pueblo de Albacete en plena A-31 que bien merece una escapada

  • Con un pasado medieval y renacentista relevante, Chinchilla es un plan perfecto para visitar en un día

  • Irónicamente, su relevancia histórica es mayor que el de la que tenía su 'aldea', que era la ciudad de Albacete

Chinchilla
Facebook Twitter Flipboard E-mail

A un tiro de piedra de la ciudad de Albacete y prácticamente sin abandonar la autovía A-31, popularmente conocida como Autovía del Sudeste o Autovía de Alicante, así es la sorpresa castellano-manchega que espera en un pueblo ante el que miles de coches pasan anualmente y donde no todos reparan en su belleza.

Hablamos de Chinchilla de Monte-Aragón, un pueblo —aunque realmente tiene la categoría de ciudad— con apenas 5.000 habitantes y en el que se da la curiosa ironía de ver cómo la aldea —Albacete— que de él dependía ha acabado siendo más grande, populosa y relevante.

Sin embargo, Chinchilla está escrita en la historia de España con grandes letras, algunas de las cuales son aún hoy el vestigio de la grandeza de esta población que ya estaba habitada durante la época musulmana y que, tras la expulsión de los árabes, siguió aumentando su relevancia.

Ubicada en un territorio fronterizo de primer orden durante la Reconquista y situada en un cerro que permitía una mejor defensa y el control de un vasto territorio, Chinchilla fue clave para el desarrollo de órdenes de caballería como la de Calatrava, antes de pasar a manos del Señorío de Villena, lo que se estimó a finales del siglo XIII.

Qué ver en Chinchilla de Monte-Aragón

Precisamente es a este casa nobiliaria, que luego sería ducado y principado, a la que debemos el Castillo de Chinchilla, una fortaleza medieval que se puede visitar en determinados momentos del año y que corona la ciudad desde el Cerro de San Blas.

Como curiosidad, cabe destacar que fue la primera cárcel española en la que fue prisionero César Borgia —hijo del papa Alejandro VI— tras ser acusado de matar a su hermano Juan —el Duque de Gandía—, una vez que el papa había fallecido.

Iglesia de Santa María del Salvador, en Chinchilla de Monte-Aragón, Albacete. ©iStock. Iglesia de Santa María del Salvador, en Chinchilla de Monte-Aragón, Albacete. ©iStock.

Además de este pasado, también conviene destacar en Chinchilla el Convento de Santo Domingo, erigido en el siglo XIII aunque profusamente reacondicionado, así como la Iglesia de Santa María del Salvador, oriunda del siglo XIV, pero cuyo cenit se alcanzaría en el siglo XVII, ya inmerso en el barroco, del cual es testigo su preciosista interior.

Aparte de su legado arquitectónico, Chinchilla también es particularmente conocida por las cuevas-vivienda que se horadaron aprovechando la falda del cerro, algo que ya hemos visto en otros pueblos de Castilla-La Mancha como Alcalá del Júcar, también en Albacete, o en Campo de Criptana, en la provincia de Ciudad Real.

Panorámica de Chinchilla de Monte-Aragón, Albacete Panorámica de Chinchilla de Monte-Aragón, Albacete

Estas cuevas, algunas de ellas hoy visitables, fueron el refugio de judíos y moriscos tras la expulsión de ambos a lo largo del siglo XVI. Si bien es cierto que, ya más adelante, las clases menos favorecidas de Chinchilla también se alojarían aquí.

Como contraste, no menos relevante es hacer un repaso por algunos de los palacios que aún hoy permanecen en pie en este municipio albaceteño como el Palacio de Barnuevo, el Palacio López de Haro o el Palacio de Núñez Robres, vestigios de esa importancia de Chinchilla desde el medievo hasta la Edad Moderna.

En ruta por Castilla-La Mancha 1: 22 Rutas por carretera (Guías En ruta Lonely Planet)

Ya en la Edad Contemporánea, con España menos expuesta a guerras —salvo la Guerra de la Independencia—, Chinchilla perdería su predominancia en favor de Albacete, situada en el llano y más amable para la vida, dejando en un segundo plano a la hasta entonces relevante Chinchilla.

Imágenes | iStock

En DAP | En busca de los auténticos Miguelitos: el dulce de La Roda que conquistó la autopista

En DAP | 3.000 hectáreas, 21 tipos de viñas y un montón de marihuana: visitamos Pago Guijoso, “una de las fincas más punteras de Europa”

Inicio