A la hora de comer algunas partes de la carne parecen menos dignas que otras, y así puede parecer, pues no todas están a la venta en los lineales de los supermercados, y de hecho, las vísceras suelen ser minoritarias.
Este es el caso de una de las partes del pollo que Mercadona tiene a la venta en su sección de carnicería, unas bandejas que han llamado la atención de los usuarios y que los han dividido a favor y en contra.
Se trata de los Cuellos de pollo Hacendado, que la cadena de Juan Roig comercializa en bandejas de 638 gramos y a 2,50 euros el kilo; es decir, cada envase cuesta 1,60 euros.
Este producto, del Grupo Uvesa de Navarra, tiene 15 gramos de proteínas por cada 100 gramos, y 119 calorías, así como 6,4 gramos de grasas. No obstante, la noticia no son sus ventajas o desventajas nutricionales, sino lo que los usuarios opinan sobre este producto.
En las redes, esta novedad ha despertado pasiones, pero también ha tenido detractores, entre quienes ensalzan sus cualidades gastronómicas y quienes destacan el “asco” que supone comerse esta parte.
Por ejemplo, una extrabajadora de carnicería explica que este tipo de partes se suelen dar a los perros porque nadie quiere las cabezas ni las patas, mientras que otros bromean con que del pollo se come todo menos el pico.
Ciertamente, los cuellos de pollo son, por su contenido nada desdeñable en carne, piezas útiles para dar sabor al caldo, como las carcasas y las alas, pero esta no es la única manera de degustarlos.
Existe buena tradición entre quienes se comen los cuellos de pollo fritos con ajo: “Están de muerte”, aseguran algunos, mientras que otros se los comen en salsa, pese a que tienen muchos huesitos.
Foto | Joana Costa
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