Dar la nota en la final del Mundial fue el último gran show de Salt Bae, el carnicero turco cuyo nombre realmente es Nusret Gökçe y que saltó a la fama hace unos años por recibir en sus restaurantes a estrellas de cine, cantantes, deportistas y otras celebrities.
Montado en el dólar —y en la moneda que haga falta—, de Nusret no se sabe demasiado en cuanto a su vida privada más allá de ser hijo de kurdos (y de haber nacido en Erzurum, una ciudad universitaria en el noreste de Turquía, en 1983) de donde emigraron cuando Nusret tenía solo 10 años.
Lo que sí parece, echando un vistazo a su biografía, es que un empresario hecho a sí mismo y con una cadena de restaurantes que se expande por Turquía, Grecia, Estados Unidos, Reino Unido, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudí y Catar no tiene visos de frenar y que tiene 30 restaurantes repartidos por esos países bajo diferentes marcas, formando parte del conglomerado d.ream (Doğuş Restaurant Entertainment and Management), propiedad de la firma Doğuş Group y que es realmente el propietario de estos restaurantes.
Fue en Catar precisamente donde acabó saltando al césped para celebrar con la selección argentina la consecución del título, lugar en el que más polémica ha suscitado tras recibir en su restaurante a Gianni Infantino, presidente de la FIFA y es en Catar, también precisamente, donde el fondo soberano del país catarí tendría interés en comprar un 20% de D.ream Group, valorado en 300 millones de dólares.
Líos aparte, lo que sí es cierto es que Nusret ha exportado con d.ream un modelo gastronómico con una cadena de asadores de lujo bautizada como Nusr-Et (un juego de palabras entre su propio nombre y et, que significa carne en turco) donde llegamos a encontrar solomillos, entrecots y filetes bañados en oro, lo que se ha convertido en el sello de la casa junto al particular toque de Nusret.
Nos referimos, como es evidente, a la forma de salar la carne que Nusret tiene y que fue lo que le convirtió en tendencia viral a principios de 2017 por lo refinado del gesto, además de por cómo cortaba la carne. Lo cierto es que hasta llegar a ese punto a costa del llamado 'Filete Otomano', Nusret ya tenía dos restaurantes, uno en Estambul (abierto en 2010) y otro en Dubái (abierto en 2014) y a partir de ahí llegó su estrellato y sus críticas.
Pendiente de abrir en España —estaba pautada una apertura en Ibiza a lo largo de 2022, que no se ha producido—, Salt Bae ha sido anfitrión de artistas como Leonardo diCaprio, Andrea Bocelli y Al Pacino; futbolistas como Leo Messi, David Beckham o Cristiano Ronaldo, e incluso de personalidades como el citado Infantino o Nicolás Maduro, presidente de Venezuela.
Criticado por los altos precios de sus restaurantes y por la calidad de la carne (algo que no podemos atestiguar), la realidad es que Nusret Gökçe es una personalidad mediática que ha sabido rentabilizar un gesto y una carrera que empezó cuando solo tenía 10 años, haciendo de ayudante de carnicero, e incluso llegando a trabajar gratis en restaurantes estadounidenses y argentinos para formarse.
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Lo cierto, guste o no, es que ha conseguido explotar un filón mediático que llena sus restaurantes a costa de fotos de Instagram y de filetes dorados, lo cual no podemos reprochar desde la teoría. Por cierto, como última curiosidad, no queremos dejar de apuntar que Doğuş Group también es accionista de Grupo El Paraguas y responsables de la internacionalización que esta cadena de restaurantes entre las que están Ten con Ten, Amazónico, Ultramarinos Quintín o El Paraguas, y que también fue brevemente propietario del hotel Villamagna de Madrid.
Imágenes | nusr-et.com
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