Una nunca sabe muy bien si el mes de enero ha pasado volando o si sus días han avanzado a ritmo lento y parsimonioso. En ambos casos nos suele dejar un sensación agria de cierto hastío cuyo mejor remedio, en nuestra humilde oponión, es recuperar el confort de la cocina casera de sabor tradicional.
Porque las recetas con sabor tradicional preparadas en casa nos traen buenos recuerdos y sensaciones perdidas, nos pueden ayudan a desconectar y relajarnos, a compartir momentos en familia o con amigos y a reencontrar una rutina saludable de comidas y cenas. Y los platos que más saben a hogar siempre pertenecen más a los días de frío, cuando calentar el estómago también nos reconforta a otros niveles.
Por todo ello hemos elegido un buen listado de recetas fichadas estos días por las redes para plantear ideas de menús caseros, con platos ideales para esta época. Febrero vendrá con nuevas festividades a la vista y ya atisbando el inicio de la primavera, pero aún nos quedan semanas de invierno por delante. Refugiémosnos pues tras los fogones.
Entrantes y primeros
No podíamos empezar este menú de otra manera que no fuera con una sopa, y de hecho lo hacemos con dos. Arrancamos con la tradicional sopa de cebolla de Chup chup chup, en su versión francesa servida con la típica rebanada de pan gratinada con queso, que es como más rica está, para qué engañarnos. Silvia nos comenta que hay muchas variantes de esta humilde sopa de origen antiguo, pero su receta no añade ninguna bebida alcohólica.
En Cocinando entre olivos tenemos un plato curioso albaceteño, la sopa azotabarbas, cuyo peculiar nombre hace referencia a que, originalmente, se preparaba con fideos largos gruesos que "azotaban" la barba del comensal al comerla. Ana María la hace con fideos finos comunes de sopa, y lleva, además, jamón, chorizo, cebolla, tomate y azafrán.
Seguimos con platos de cuchara, ahora con una saludable crema de garbanzos y puerro, obra de Mai en Hierbas y especias, sencillísima a más no poder e igual de nutritiva y sabrosa. Podríamos combinarlas en un menú vegano con las alcachofas con salsa romesco que nos propone Mary Luz en Cuchillito y tenedor, una forma estupenda de disfrutar de esta exquisita hortaliza.
El plato principal
Enlazamos los garbanzos de la suave crema con un plato más completo con sabor a mar, los garbanzos con gambas de Les receptes del Miquel, una receta sencilla pero que se convierte en todo un manjar partiendo de garbanzos secos, gambas rojas, fumet y añadiendo la tradicional picada de frutos secos. Para mojar mucho, muchísimo pan.
Y quien prefiera la legumbre con sabores de campo, pero no tenga mucho tiempo para cocinar, en Migas en la mesa tenemos un suculento pollo con garbanzos en slow cooker con sabores de inspiración árabe, gracias al toque de aceitunas, pasas y especias. Ana además nos da consejos para hacerlos también en modo tradicional o usando garbanzo de bote.
Otra elaboración muy de cocina casera son las albóndigas, de las que todos tenemos alguna versión familiar en el recuerdo. En Chez Silvia nos espera una receta a base de pollo con guisantes, bien completa y saludable, mientras que en Julia y sus recetas tenemos albóndigas en salsa de cebolla. Como dice Julia, una receta sencilla, tradicional y de las de toda la vida, ambas también para tomar con buen pan.
Terminamos la parte salada del menú con el sabroso conejo con cebolla, pimiento y berenjena de Blog de cuina de la dolorss, que debe quedar de fábula en horno de piedra, para quien tenga la suerte de tener uno en casa. Y, aunque las patatas a la importancia de Antojo en tu cocina son bien contundentes como para ser un único plato, se nos antoja como una gran guarnición para el conejo asado.
Dejamos sitio para el postre
Para el postre recuperamos dulces de antaño sin muchas florituras rememorando también meriendas y desayunos de infancia, con un vaso de leche o chocolate calentito, que hoy podemos sustituir por un café o infusión al gusto.
La repostería de toda la vida no falla nunca y por eso nos cuesta elegir entre las magdalenas integrales de Dulce algodón, con espelta, especias y semillas, y el bizcocho de almendra y naranja de Las recetas de MJ, una recreación de los cortadillos extremeños.
Más de postre son los flanes de cuajada y Oporto de La cocina de Pinky, que preparados con Thermomix no se necesita cocción en el horno, mientras que los típicos coquitos de Tengo un horno y sé cómo usarlo son un bocado tradicional delicioso que apetece a cualquier hora.
Si alguien tiene ganas de darle a las masas estos días, con un pan tierno y dulce fabuloso para untar y mojar en chocolate, el pan de viena de El invitado de invierno puede ser el plan perfecto. Aunque son panecillos perfectos para tomar como bocadillos salados, los más golosos volverán a la infancia rellenándolos con chocolate. De perdidos, al río.
Fotos de portada | Cuchillito y tenedor - Chez Silvia
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