Profeco da a conocer el precio promedio de los mariscos en México para elegir el mejor menú para esta cuaresma

Con los días de Semana Santa casi encima, en México es muy común elegir mariscos como parte de las recetas de esta temporada, populares en parte por reemplazar a las carnes rojas, y también por aprovechar los días de calor para disfrutar de una receta fresca y deliciosa, para ello, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizó su estudio anual de precios de mariscos para informar a los consumidores sobre los precios promedio de los distintos tipos de mariscos y pescados que podemos consumir esta temporada.

Para este estudio, la Profeco recopiló precios de diferentes tipos de mariscos en una variedad de establecimientos en diferentes ciudades de México, promediando así los precios que se recopilaron para tener en cuenta el costo de las diferentes presentaciones de mariscos que podemos llevar a nuestra mesa.

En el estudio, se tomaron 16 muestra de diferentes productos: desde pescado hasta camarones y almejas, considerados por el organismo público como los más populares y que pueden conseguirse en todo México

Precio promedio del camarón en México

Como uno de los ingredientes más utilizados en los platillos de cuaresma por su delicioso sabor y la gran diversidad de formas en la que los podemos preparar, los camarones son un ingrediente clave de las receas de cuaresma, por lo que la Profeco ha analizado diferentes tipos:

Precio promedio del calamar y pulpo

Como grandes complementos del coctel de camarón y muy popular en tostadas y otros tipos de caldos, el calamar y el pulpo son dos ingredientes también clave en los platillos de cuaresma.

Consejos para comprar pescados y mariscos:

Uno de los principales consejos para poder comprar mariscos y pescados frescos es el saber observar las características del producto:

• Ojos: Deben ser brillantes, transparentes y un poco resaltados.
• Piel: Debe tener una apariencia lisa y brillante, sin arrugas ni manchas.
• Escamas: Deben estar bien adheridas al cuerpo del pescado.
• Carne: Debe ser firme al tacto y no debe desbaratarse al frotarla con los dedos.
• Agallas: Deben tener un color rojo o rosado brillante y no deben tener un olor desagradable.
• Concha (para moluscos): Debe estar bien cerrada.

Además, el pescado fresco debe tener un olor a mar o a agua salada. Si el pescado tiene un olor a amoniaco, ácido o agrio, significa que no está fresco y no debe comprarse.

Como un consejo extra, el pescado debe estar refrigerado a una temperatura de 4°C o menos, por lo que es recomendable prestar atención al producto que está expuesto al hielo o en condiciones óptimas de refrigeración. Por otro lado, si el pescado está expuesto a temperatura ambiene o directamente bajo el sol, es mejor no adquirirlo.

Comprar pescados y mariscos frescos y de calidad ayudará a disfrutar de una alimentación saludable y deliciosa. Siguiendo estos consejos de Profeco, podrás elegir los mejores productos al mejor precio.

Foto de Mike Bergmann en Unsplash

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