Hace unos días publiqué una noticia sobre un congreso de alergias e intolerancias alimenticias que tendrá lugar próximamente en Madrid. Un comentarista me dijo que le parecía muy bien pero que qué pasaba con la diabetes, porque veía que no estaba presente. Debido a que en ocasiones se confunden los términos me ha parecido interesante hacer hincapié en la diabetes para entenderla mejor.
Bueno, si alguno tiene dudas sobre lo que he comentado, aclarar que la diabetes no es una alergia o una intolerancia al azúcar, si no es que es una enfermedad como consecuencia de no poder regular el nivel de glucosa en sangre. Por eso no está incluida en ese congreso. Pero veamos más detenidamente.
De todos es sabido que mucho azúcar es malo, igual que mucha sal, o mucho de cualquier cosa (sinceramente). Lo mejor es comer equilibradamente, sin abusar de nada y en especial de ingredientes con tanta química como el azúcar que ha sufrido un proceso de refinamiento muy prolongado. Pero de esto no hablaremos hoy.
Mucho azúcar en sangre tiene la capacidad de hacer que funcionen mal o incluso dejen de funcionar algunos de nuestros órganos además de provocar otro tipo de problemas. Esto no quiere decir que nos vaya a pasar nada malo, de hecho la glucosa es el principal combustible de nuestro organismo, es de donde adquirimos mayor parte de nuestra energía. ¿Pero qué ocurre cuando tenemos mucha?
Cuando tenemos mucha glucosa en sangre nuestro organismo regula su cantidad con la emisión de una hormona, la insulina. ¿Y qué ocurre cuando de forma propia no tenemos insulina? Esto es lo que les ocurre a los diabéticos. Es una enfermedad y no pueden controlar el nivel de azúcar de forma automática.
De ahí que los diabéticos tengan que obtener la insulina por medio de inyecciones. Pero no os creáis que la única manera de obtener glucosa es con el azúcar. Muchos alimentos como las patatas o el arroz nuestro organismo los transforma en glucosa, también ayudan otros tipos de azúcares.
Por supuesto que no soy médico y por lo tanto muchas cosas se escapan, pero aquí quería reflejar de forma sencilla una enfermedad que sufren muchas personas. De hecho lo mejor que podemos hacer es controlar de vez en cuando este tipo de cosas para poder dar respuesta cuanto antes y no cuando sea demasiado tarde.
Fotos | rahego | juanpol
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