La historia se remonta al año 2002, cuando un indio encontró en una botella de Pepsi Mirinda (refresco de naranja) que compró en Dharamsala, en e Himalaya, gusanos e insectos.
Denunció el hecho y los científicos de un laboratorio de Dandhagat examinaron la bebida, los resultados eran desalentadores para Pepsi, pues aseguraron que era muy peligrosa para la salud, así que el consumidor no dudó en imponer una demanda.
Dados los resultados, ayer se impuso una multa a Pepsi (tras cinco años…) de unos 1.800 euros (100.000 rupias), además de volver a levantar un fantasma que les persiguió el pasado año con el escándalo conocido como “Pesti-Cola”, pues hallaron pesticidas en la bebida. En un primer momento tres estados de la India ya prohibieron la comercialización del refresco, pero sólo hasta que el Gobierno afirmó que el consumo de Pepsi era seguro tras unas declaraciones de la compañía.
En Genciencia se dio a conocer la noticia.
Es realmente una pena que compañías tan influyentes caigan tan a menudo en errores que perjudican a la salud de los consumidores. ¿Quién se puede fiar?, ¿crees que la multa es suficiente?
Vía | El Confidencial En Directo al Paladar | En la India ya se puede beber Coca Cola