Uno de los platos que más gustan son los huevos fritos con patatas y chorizo, pero todos sabemos que es un plato con mucha carga calórica y por eso no podemos tomarlos más que de vez en cuando. Por eso se me ocurrió estos pinchos de huevo de codorniz con sobrasada, para hacer una combinación similar en tamaño mini con la que alegrar los entrantes o servir de aperitivo.
El resultado como veréis en cuanto os animéis a prepararlo es una explosión de sabor, una mezcla de texturas y temperaturas que llena de alegría al primer bocado y sienta de maravilla para acompañar una cerveza fresquita o un vino de vuestro gusto.
Ponemos una sartén con abundante aceite a calentar. Preparamos unas patatas paja pelando y cortando la patata con una mandolina o un cuchillo bien afilado. Una vez cortadas, las dejamos en agua fría para quitarles el almidón de forma que luego no se nos peguen unas con otras. Tras freírlas, las escurrimos en papel absorbente.
En el mismo aceite de freír las patatas, vamos friendo con cuidado los huevos de codorniz. Como son pequeños, no tendréis problemas de hacer dos o tres cada vez. Recordad que para romper la cáscara no hay que golpearla contra un filo como hacemos con los huevos de gallina.
Lo más práctico es hacer un agujerito con un cuchillo o incluso usando unas tijeras y retirar con cuidado parte de la cáscara para que por ahí salga el contenido sin romperse la yema. Con un poco de práctica, cada vez resulta más sencillo, no os preocupéis.
Tostamos las rebanadas de pan para que esté más crujiente y además caliente y untamos una pequeña cantidad de sobrasada de Mallorca sobre cada tostada. Con cuidado, colocamos encima de cada tostada un huevito de codorniz y rematamos con un puñadito de patatas fritas para que le den el crujiente.
Con qué acompañar los pinchos de huevo de codorniz con sobrasada
Estos pinchos de huevo de codorniz con sobrasada están deliciosos, y ya veréis que en cuanto los preparéis un día, os los pedirán a menudo. Con una cerveza bien fría resultan un excelente aperitivo para el fin de semana. Eso sí, no hagáis más de dos de estas tostas por persona, ya que con lo buenas que están, seguro que os las comeríais.