En los últimos años estoy redescubriendo las posibilidades infinitas de la zanahoria. Mi madre siempre la usaba acompañando otros ingredientes y nunca le daba protagonismo especial, pero a mí cada vez me gusta más convertirla en el foco de atención de platos diferentes. Hoy, una ensalada de zanahoria con queso de cabra, nueces y aliño de azahar, especial para el verano.
Os animo a jugar con las texturas de la zanahoria en crudo porque sorprende los diferentes resultados y sensaciones que provoca en el paladar. Para esta ensalada seguí la inspiración de esta receta y saqué tiras finas como si fueran fideos, imitando de nuevo a la pasta pero para comerla en crudo. También se podría blanquear muy ligeramente, dejándola más suave, aunque aconsejo manetener el punto crujiente y fresco.
Lavar y secar las zanahorias, pelar ligeramente y cortar la punta del tallo. Cortar en tiras finas, imitando los fideos o tallarines delgados, con la herramienta que más nos guste: mandolina, cortador especial, rallador, pelador en juliana, espiralizador, a cuchillo, etc. Yo he usado un pelador con puntas que saca tiras finas muy fácilmente.
Mezclar la zanahoria con un chorro de la mitad del limón para que no se oxide. Podemos darle un golpe de vapor, blanquearla en agua hierviendo o en el microondas si preferimos una textura más tierna, pero que sea muy breve. Colocar en una fuente o plato hondo y ancho y mezclar con las nueces partidas y el queso desmenuzado.
Rallar el jengibre pelado, picar la guindilla o chile sin las semillas y poner en un cuenco pequeño. Añadir el aceite de oliva, el agua de azahar, la miel, el vinagre, un poco de zumo de limón, comino en grano al gusto y la sal, y batir bien hasta tener una vinagreta emulsionada. Aliñar la ensalada, mezclar y servir con pimienta negra molida, perejil, cilantro, o tomillo.
Con qué acompañar la ensalada de tallarines de zanahoria
Esta ensalada de zanahoria con queso de cabra, nueces y aliño de azahar es muy ligera pero sorprendentemente saciante si tomamos una buena ración, así que la veo estupenda para una cena con una crema fría o algo de buen pan al lado. Podemos prepararla con antelación y tomar para llevar en un picnic, o servirla de primer plato antes de un pescado al horno o carne a la plancha. También es un buen plato para preparar en una comida de barbacoa.
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