Además de desatar una locura por los bizcochos y el pan, el confinamiento ha vuelto a dar protagonismo a alimentos de despensa que, quizá, teníamos algo olvidados o reservados a otros usos. Es el caso de las latas y conservas, con las que podemos aprovechar para casi improvisar un plato de macarrones con atún sin apenas recurrir a ningún ingrediente fresco.
El trío protagonista del plato lo completan anchoas y alcaparras, que con un toque picante y el ácido fresco del limón ya nos regalan un acompañamiento muy sabroso y aromático para disfrutar de un plato de pasta fresco y nada pesado, perfecto para la primavera, o para cuando nos hemos quedado sin reservas de salsa de tomate.
Laminar los dientes de ajo, picar o chafar las anchoas ligeramente escurridas y poner a hervir abundante agua con sal para cocer la pasta.
Pponer los ajos a calentar con fondo de aceite de oliva en una buena sartén, añadiendo también la cayena. Cocinar a fuego suave para que se doren pero vigilando bien que no lleguen a quemarse; esto puede ocurrir en cuestión de segundos. Machacar la cayena para que se vaya incorporando al fondo.
Añadir a la sartén las anchoas con las alcaparras cuando los ajos estén bien dorados. Saltear un par de minutos, añadir el atún ligeramente escurrido y remover bien. Regar con el vino, añadir orégano y un chorrito de medio limón.
Echar la pasta en el agua cuando esté hirviendo y cocer hasta dejar la al dente, reservando parte del agua de cocción. Echar un par de cucharones del agua a la sartén, remover bien e incorporar la pasta escurrida. Mezclar el conjunto y cocinar uno o dos minutos más, agregando un poco más de agua de cocción si fuera necesario.
Servir con pan rallado y ralladura de limón, más un poco de orégano extra. Si lo preferimos, podemos dorar previamente el pan con la ralladura en una sartén, con un poco de aceite -especialmente si es pan rallado industrial-.
Con qué acompañar los macarrones
En casa siempre somos de tomar la pasta como plato único, quizá acompañada de una ensalada sencilla, aunque podríamos completar el menú con un segundo de carne o pescado, sirviendo raciones más comedidas. Cuando apriete más el calor, esta receta de macarrones con atún, anchoas y alcaparras se podrá degustar también templada o fría, casi como una ensalada marinera de pasta.
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