El wonton (o wan tan, como se dice en cantonés) es uno de esos bocados chinos que conquistan por lo sencillos que son. Su nombre significa “nube”, y no es casualidad: al cocerlos en el caldo parecen pequeñas nubes flotando.
La receta que te enseño aquí es una versión casera y práctica. Si tienes wonton en el congelador, puedes montar la sopa en apenas 10 minutos. Las cantidades de relleno que doy sirven para preparar unas 36 piezas. No te preocupes, en la sopa solo usaremos unas 10, el resto puedes congelarlos y tenerlos listos para otra ocasión.
Sobre los ingredientes
El relleno clásico de los wonton lleva carne de cerdo picada y un poco de gamba, además de jengibre, salsa de soja, aceite de sésamo y vino Shaoxing, que es un vino de arroz chino. No pasa nada si no lo tienes, un poco de vino de jerez funciona bastante bien como sustituto.
Para envolver el relleno se usan obleas de wonton ya hechas, que suelen ser cuadradas y amarillas, y puedes encontrarlos en la sección de congelados del supermercado asiático. Son finas, manejables y se sellan bien con un poco de agua en los bordes. También puedes hacer la masa de wanton casera, aunque lleva algo más de trabajo. La verdad, tanto una opción como la otra funcionan perfectamente, depende de si quieres ir más rápido o si te apetece dedicarte a hacerlas desde cero. En esta receta he optado por hacerlas caseras, porque me gusta el proceso y así controlo bien el grosor de la masa.
En cuanto al caldo, lo más sencillo es un buen caldo de pollo casero con un poco de jengibre y cebolleta. En China es bastante común hervir directamente los wonton en agua y luego sazonar esa misma agua para convertirla en la sopa. Funciona, pero obviamente el resultado gana muchísimo si usas un caldo con sabor de base.
Para servir, puedes terminar con cilantro fresco, la parte verde de la cebolleta o incluso un poco de pak choi cortado y hervido apenas un minuto en el caldo. Cada opción le da un toque distinto y todas funcionan bien.
Cómo hacer los wonton
Mezcla todos los ingredientes del relleno en un bol hasta que quede una pasta bien integrada. Coge una oblea con las manos o colócala en la mesa. Pon en el centro una cucharadita de relleno. Moja los bordes con un poco de agua y pliega la oblea por la mitad para cerrar (en forma de triángulo). Aprieta bien para sellar y luego une las dos puntas para darle forma (aunque no te agobies, hay muchas maneras de cerrarlos y todas funcionan).
Si no los vas a usar todos, congélalos en una bandeja separados unos de otros. Una vez duros, guárdalos en una bolsa y ya los tendrás listos para otra vez. Recuerda que las cantidades de esta receta son para aproximadamente 36 wontons.
Para cocinarlos, pon agua a hervir y cuece los wontons hasta que floten si usas masa comprada. Si has hecho la masa casera, tardarán unos 8 minutos en estar listos.
Cómo preparar la sopa de wonton
Mientras tanto prepara el caldo. Pon en una olla el caldo de pollo con unas rodajas de jengibre y la parte blanca de la cebolleta. Añade un chorrito de vino Shaoxing, un poco de salsa de soja y una pizca de pimienta blanca. Deja que hierva suave unos 5 minutos para que coja sabor.
En el cuenco de servir coloca un buen puñado de cilantro fresco . Vierte el caldo caliente encima y añade los wontons recién cocidos.
Con qué acompañar la sopa de wonton
La sopa de wonton se puede tomar sola como cena ligera, pero también combina genial con otros platos chinos. Puedes acompañarla con unos rollitos de primavera, un salteado de verduras o incluso un arroz frito. Si quieres un menú más completo estilo dim sum, añade unos siu mai o unos baozi al vapor.
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