Este pueblo medieval, a poco más de una hora de Barcelona, es uno de los más bonitos de Cataluña (y su castillo es hoy un Parador)

Cataluña tiene mucho que ofrecer al viajero más allá de su capital, las playas y los Pirineos. Y no hace falta alejarse mucho de Barcelona para descubrir parajes que parecen sacados de otra época, como el encantador pueblo de enorme riqueza histórica que se esconde a poco más de una hora de la ciudad condal.

Se trata de Cardona, una localidad que se ha ganado el sobrenombre de ciudad de la sal pero que principalmente es conocida por su carácter de villa medieval. En un entorno natural de gran belleza que ya de por sí merece una visita, Cardona se abre a los pies de un magnífico castillo, un conjunto fortificado originario del siglo IX que hoy alberga uno de los Paradores más atractivos de nuestro país.

Este castillo fue durante la época medieval la residencia de los señores de Cardona, los llamados reyes sin corona, todo un ejemplo de fortaleza inexpugnable que resistió multitud de asedios y batallas durante siglos. Además del Parador, en su interior se encuentra la Colegiata de San Vicente, magnífico ejemplo del románico lombardo catalán, y el conjunto está abierto a visitas guiadas.

La propia localidad es perfecta para perderse recorriendo sus calles y plazas, que conservan esa huella medieval en cada rincón de su centro histórico, declarado Bien Cultural de Interés Nacional. Nacida como burgo entorno al mercado que se celebraba a los pies del castillo en el siglo IX, la pintoresca villa es hoy una localidad llena de vida que todavía no sufre las masificaciones de turistas de otros lugares más conocidos de Cataluña.

Aunque esto podría cambiar pronto, pues medios de renombre como Viajes National Geographic la han destacado como uno de los pueblos más bonitos de España, e incluso se está dando a conocer gracias a labor divulgativa que hace el humorista, actor y cineasta Berto Romero, originario de este pueblo.

El apodo de ciudad de la sal que comentábamos al principio le viene por otro de los mayores puntos de interés que tiene Cardona, el Parque Cultural de la Montaña de Sal. Se trata de una antigua mina potásica que hoy ofrece un espectacular recinto protegido y adaptado a visitantes de todas las edades para conocer de primera mano el excepcional yacimiento geológico natural y la importancia cultural, social y económica que la sal ha tenido en la historia de la zona.

Cardona bien merece planificar una pequeña escapada desde la propia Barcelona o desde otros puntos de nuestro país, para conocer a fondo su legado histórico, su animada vida actual con una agenda llena de eventos y fiestas locales, y también para explorar los alrededores de su marco natural con todo tipo de excursiones y actividades al aire libre.