El consumidor está aprendiendo a leer con minuciosidad las etiquetas de los productos. Aunque estafar está prohibido, nadie se fía de que las grandes cadenas como Mercadona aprovechen la letra pequeña para engañar o despistar, sobre todo en relación con los precios. Y por eso algunos clientes han denunciado en redes sociales un supuesto fraude al comparar las etiquetas amarillas y naranjas que lucen muchos estantes de la cadena, una confusión que Mercadona ha procedido a aclarar.
El pasado mes de abril Mercadona anunció que se iban a empezar a bajar los precios de hasta 500 productos en un proceso paulatino que se extenderá hasta finales de año. Es una medida que también han aplicado otros supermercados, para reajustar los precios de venta a la bajada de costes de las materias primas. Y para dejarlo patente, como explicaron mediante nota de prensa en su día, colocarían una etiqueta en otro color que reflejaría esa bajara de precio.
Pero parece que tanta etiqueta, colores y números no hacen más que confundir al cliente, muy susceptible ante la idea gastar más de la cuenta en la cesta de la compra.
Por ejemplo, el usuario de Twitter Jorge Enrique Luque compartía una fotografía tomada en una de las tiendas de la compañía, mostrando una de color salmón y otra amarilla, relativa a unas flautas de queso, En ambas se lee el precio de 1,75 €, pero la amarilla además destaca "Bajada de precio". Y pregunta que dónde está ese supuesto descuento, añadiendo que ocurre lo mismo en muchos otros productos.
Mercadona responde con un pequeño hilo aclaratorio:
En las etiquetas amarillas de Bajada de Precio, se podrá ver en la parte superior derecha el precio anterior (tachado) que tenía ese producto y en la parte central el precio actual. Las etiquetas color salmón son nuestras etiquetas de precio habituales que muestran el precio actual de cada producto. El importe de la etiqueta salmón debe coincidir con el importe que aparece en la etiqueta amarilla (precio sin tachar).
Es decir, las etiquetas naranja o salmón son las corrientes de toda la vida de Mercadona, que indican el precio actual en vigor y que no se espera que cambie a corto o medio plazo. Y las amarillas muestran en más pequeño y tachado el precio anterior que ahora ha experimentado esa disminución de precio que anunció la cadena. Lógicamente, el precio no tachado de ambas debe ser el mismo.
Sin embargo, la explicación no parece haber aclarado las dudas, ya que varios usuarios replican que no lo entienden o que siguen creyendo que están engañando. "Desde mi punto de vista", comenta Jorge @metrenco1956, "no aclara absolutamente nada, al contrario, demuestra que en ese etiquetado hay un engaño o un feo error".
Otros clientes confirman que ese doble etiquetado es muy confuso y no tiene sentido; "qué pasa, qué nos queréis volver locos?", pregunta @Celia88629637; "en la mayoría de comercios sólo se deja una con el importe actual rebajado y el anterior", añade @hornazo. Ciertamente es algo confuso si uno no se para a leer con detenimiento el etiquetado.
Utilidad real no tiene para el consumidor. La estrategia de Mercadona parece responder solo a querer presumir de esa bajada de precios tan cacareada, tras meses de ser blanco de críticas por la subida del coste de casi todos sus productos. Al final la medida parece que está teniendo el efecto contario y solo está consiguiendo aumentar la imagen negativa de muchos clientes.
Un científico en el supermercado: Un viaje por la ciencia de las pequeñas cosas (No Ficción)
Foto | Jorge Enrique Luque
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