Cuándo nos llega la invitación para la presentación del libro Recetas para el Recuerdo, explicando que es un proyecto solidario y que todo lo que se venda, integro, irá destinado a la Federación de Alzheimer de Galicia, nos da una punzada interior. El impulso es decir sí: hay que conocer este proyecto. Lo que no podíamos imaginar es que detrás hay una marca, de Azafrán: Pote. Y que hay un transfondo científico: según estudios recientes, en los que colabora la firma con la Universidad de Castilla la Mancha, hay indicios de que el azafrán podría ser bueno para prevenir el Alzheimer.
Según las nuevas investigaciones, su consumo podría prevenir y ralentizar los efectos de enfermedades neurodegenerativas como el párkinson (ya que protege las células cerebrales responsables de la producción de dopamina y estabiliza los niveles de esta sustancia), la esclerosis múltiple y el alzhéimer. Ya había indicios de que cómo la cúrcuma, el azafrán podría estar relacionado con la mejora de los síntomas de la depresión.. Todos estos estudios están en desarrollo, y habrá que darles tiempo para ver si finalmente hay una cura definitva para la tristeza que se esconda en la paella y en los deliciosos guisos de carne y pescado de las abuelas. A lo mejor, efectivamente, esa alegría de domingo no era sólo el reencuentro con la abuela y con su delicioso guiso, o lo familiar del aperitivo entorno al arroz con sus carabineros... Que no es poco. Tal vez haya más detrás y en eso están. Pero mientras, el proyecto de Pote, merece una parada.
"Recetas para el Recuerdo" recupera doce platos tradicionales en proceso de olvido o en desuso que han sido recuperados a partir de los testimonios de doce mujeres con Alzheimer y de sus familiares. Hay varios guisos, dos empanadas, tres arroces, y un dulce. Y lo que se recaude de su venta (de momento sólo se puede comprar en su web por 15 euros), irá integramente a los Centros de Día de FAGAL, que es la Federación de Alzheimer de Galicia. Es curioso porque la empresa Pote es alicantina, de Novelda. Pero en los años 40 sus directivos decidieron centralizar sus esfuerzos comerciales en Galicia, Asturias y la parte más occidental de Castilla y León y consiguió así entrar en las despensas de las casas y las cocinas gallegas y asturianas. Con esta acción, la empresa se acerca de nuevo a la región que más agradecida ha sido con su producto.
Ganas de comprar y tener el libro y apoyar a los enfermos de esta enfermedad, ya hay. Pero además para contarnos esta historia, han hecho un vídeo conmovedor. En él, se ve a Mercedes Novas, una mujer enferma de Alzheimer que ya según nos cuentan ya no recordaba su receta, Ropa Vieja en Pote Gallego. Al dársela a probar, realizada con las indicaciones de su familia por el chef gallego Yayo Daporta, le llega un momento de lucidez y de recuerdo estremecedor: rememora cómo se llenaba la fuente de verdura y de patata y la felicidad de ver que había comida para todos. El que no llore con estas imágenes, es que tiene el corazón ya muy duro. Además de la tristeza que te invade, el vídeo se revela como un gran ejemplo de lo importante que es el sabor y su conexión con la memoria.
Y sí, el libro y la acción en general, deja latente lo importante que es la memoria y la herencia gastronómica y cómo no deberíamos dejar para mañana hacer nuestro pequeño proyecto familiar de recetas: nuestro propio "Recetas para el recuerdo". Y guardar siempre los sabores de nuestra vida.
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