Tarta de almendra y moras: receta para celebrar el final del verano

Tarta de almendra y moras: receta para celebrar el final del verano
Facebook Twitter Flipboard E-mail
esther-clemente

Esther Clemente

Colaborador

Soy una chica coruñesa, veterinaria de profesión y que por circunstancias de la vida acabé viviendo en Asturias donde llevo ya una buena temporada. Cuando me preguntan por qué me gusta tanto cocinar, siempre respondo lo mismo: "¡Por qué mi madre odia meterse en la cocina!".

20 votos

Quizá os pueda sonar un poco rara la mezcla de frutos secos con moras, pero os aseguro que casan a las mil maravillas y si os podían parecer de antemano pesadas las tartas con almendra, al unirse con el ácido de la fruta forman una combinación perfecta. Y como siempre, y según lo que queráis trabajar en la cocina, se puede hacer la masa base casera o bien comprar una lámina refrigerada, os lo dejo a vuestra elección. Yo en esta ocasión me decanté por comprarla pues andaba un poco justa de tiempo.

Ingredientes

Para 8 personas
  • Masa quebrada 1
  • Mantequilla atemperada 100 g
  • Azúcar 100 g
  • Huevo M 2
  • Almendra molida 100 g
  • Harina de repostería 1 cucharada
  • Moras 170 g
  • Almendra laminada 30 g

Cómo hacer tarta de almendra y moras

Dificultad: Fácil
  • Tiempo total 45 m
  • Elaboración 25 m
  • Cocción 20 m

Comienza precalentando el horno a 180ºC. Estira la masa en un molde desmontable redondo y pínchala con un tenedor. Métela en el congelador durante diez minutos y hornéala durante quince minutos. Retírala del horno y mientras, prepara el relleno.

Bate en un bol la mantequilla a temperatura ambiente con el azúcar, los huevos, la almendra molida y la cucharada de harina normal. Repartir por la base de la tarta, añadir las moras por toda la superficie.

tarta de almendra y moras

Espolvorear la almendra laminada por encima y hornéala durante 20 minutos aproximadamente o hasta que veas la superficie dorada.

20 votos

Con qué a acompañar la tarta de almendra y moras

La tarta de almendra y moras se puede tomar templada o a temperatura ambiente. Podéis acompañarla con un poco de nata montada o creme fraiche. Como no lleva ni cremas ni nata puede conservarse, eso sí, protegida del aire, sin refrigerar. Si tenéis moras congeladas podéis seguir preparándola aún fuera de temporada.

En Directo al Paladar | Tarta de higos, ciruelas y almendra: receta suiza de postre de verano
En Directo al Paladar | Pastel de moras con buttermilk o suero de leche: dulce sobremesa de finales de verano

Inicio