Seguro que las habréis probado si habéis estado en Málaga, aunque este molusco bivalvo de gran tamaño, se encuentra en más zonas de nuestra geografía. Por si las veis en vuestra pescadería o las compráis online, hoy os enseñamos a limpiar y preparar las conchas finas malagueñas o ameixones gallegos y de paso, os damos la mejor receta para disfrutar con este molusco.
Este molusco, cuyas conchas o valvas simétricas pueden superar incluso un tamaño de 10 cm, tiene un color marrón brillante y anaranjado, y se caracteriza también por la suavidad de su concha, que es brillante y parece pulida.
Las conchas finas o amiexones son fáciles de abrir y se pueden preparar, una vez limpias, de varias maneras, si bien lo habitual es prepararlas al natural, con unas gotas de zumo de limón y un poco de sal y pimienta.
Las conchas finas también están riquísimas cocinadas con ajo y perejil, o en crudo rellenando su interior con una vinagreta o pipirrana. De una u otra forma, el proceso comienza con la limpieza que ahora os explicamos con detalle.
Cómo limpiar las conchas finas o ameixones
Para abrir, es costumbre darles un golpe antes de meter el cuchillo, de forma que así la almeja -que está viva- se reparte mejor en el interior para que al cortarlo, quede carne en ambas valvas. Después, metemos el cuchillo por la ranura o separación y cortamos con facilidad.
Una vez abiertas, nos interesa conservar en la medida de lo posible el líquido que contiene el interior de los ameixones. Os recomiendo vaciar ese líquido de las conchas finas en un cuenco para después retornarlo porque en la limpieza se os derramaría perdiendo una parte importante del placer de su degustación.
El siguiente paso es retirar una telilla o sección de color verdosa o amarronada, situada junto a la unión de ambas conchas, que puede tener algo de arena. Es una tarea sencilla que podemos hacer con unas tijeras o con un cuchillo o puntilla. Y ya las tenemos listas para su consumo, procediendo a pasar un cuchillo por debajo de las almejas para que se suelten de su concha y así facilitar su degustación.
Cuando las hayamos preparado al natural o con la elaboración que queramos hacer, terminaremos repartiendo el caldo o agua de su interior que habíamos guardado al abrirlas entre todas las conchas finas.
Para hacer conchas finas al natural, basta con abrirlas y limpiarlas tal como os hemos explicado en los pasos anteriores. Una vez dispuestas en la fuente, las salpimentamos ligeramente y añadimos unas gotas de zumo de limón en cada una, completando con su agua reservada.
Ya las tenemos listas para servir, lo cual podemos hacer sobre una cama de sal gruesa, una cama de hielo picado o simplemente dejándolas en la bandeja o fuente para comerlas cuanto antes. Ponemos unos gajitos de limón para quien quiera añadir más, y corriendo a la mesa.
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Con qué acompañar las conchas finas malagueñas o ameixones gallegos
Para acompañar este delicioso plato de conchas finas al natural, os recomendamos continuar con alguna otra receta de fritura malagueña, como por ejemplo unos clásicos boquerones al limón, o si queréis unas sardinas cocinadas sin olores en el microondas. El éxito lo tenéis garantizado.
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