Hoy vamos a preparar una salsa alioli sin huevo ideal para acompañar nuestras comidas y con un sabor riquísimo, perfecta para aquellos que tienen intolerancia al huevo o para minimizar los posibles riesgos de salmonella, que sobre todo en épocas de calor, pueden aparecer al consumir huevo crudo.
Aunque el alioli tradicional contiene simplemente ajo, aceite y sal, no a todo el mundo gusta una salsa tan potente. Con esta versión más suave, la salsa alioli se convierte en la salsa estrella para acompañar muchas preparaciones y al gusto de casi toda la familia.
Comenzaremos echando la leche a temperatura ambiente en el vaso alto de la batidora, seguidamente añadimos el aceite, la sal y el diente de ajo, que si no queremos que repita deberemos de retirarle el germen que tiene en su interior.
Comenzamos a batir sin levantar el brazo de la batidora de la mezcla hasta que veamos que la leche se ha emulsionado con el aceite y la mezcla haya espesado.
Entonces daremos dos o tres movimientos con el brazo de la batidora de arriba abajo a través de la salsa, y comprobaremos si está a nuestro gusto de sal y ajo, así como le agregaremos más aceite o más leche según la queramos más espesa o rala respectivamente.
Con qué acompañar la salsa alioli sin huevo
Este alioli sin huevo puede añadirse para acompañar infinidad de platos. Desde unas setas a la plancha, pescados al grill o carne de pollo, es perfecta como compañera de nuestras mejores elaboraciones en temporadas de calor.
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