Echaron a los franceses y para celebrarlo se aprietan a las 9 de la mañana un vino y una trucha: así es la fiesta de San Bernabé en Logroño

Echaron a los franceses y para celebrarlo se aprietan a las 9 de la mañana un vino y una trucha: así es la fiesta de San Bernabé en Logroño
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Las fiestas patronales son el mayor reflejo de la cultura popular de cada región. No es de extrañar por tanto que, en La Rioja, todos los festejos giren en torno a su secular obsesión: el vino.

La fiesta más conocida de Logroño es San Mateo, que se celebra a finales de septiembre, coincidiendo con la vendimia. Pero en la ciudad se vive con casi igual pasión la festividad de San Bernabé, el 11 de junio, donde la gastronomía tiene incluso más importancia. Y es que la celebración central consiste en zamparse a las nueve de la mañana un pez frito (casi siempre trucha) con pan y vino.

Este particular desayuno popular, que corre a cargo de la Cofradía del Pez, tiene detrás una particular historia que, como ocurre siempre en este tipo de festejos populares, tiene 100 gramos de realidad y kilo y medio de invento.

Fuera franceses, dentro truchas

La festividad de San Bernabé conmemora la victoria, el 11 de junio de 1521, de las tropas castellanas sitiadas por el ejército franco-navarro comandado por André de Foix, señor de Asparros, en lo que se conoce como el cerco de Logroño.

Es posible que los logroñeses estuvieran comiendo mucho mejor que los franceses

La leyenda cuenta que en torno a 30.000 soldados franceses y navarros asediaron durante 17 días la ciudad que sobrevivió a base de los peces que suministraba el río Ebro, pues el resto de subsistencias fueron destinadas a la alimentación de la última vaca que quedaba en la ciudad. Esta fue engordando y se mostraba a los franceses para extender la leyenda que todos los habitantes de Logroño, incluidos los animales, tenían un tamaño sobrehumano. También cuentan que, debido al asedio, se cortó el acceso al agua potable y los logroñeses, pobrecitos, tuvieron que sobrevivir a base de pan y vino.

La historiografía actual coincide en que en el asedio participaron más bien en torno a 8.000 soldados (no 30.000) y los logroñeses no aguantaron comiendo truchas 17 días, si no más bien en torno a una semana. Como mucho, pues no hay absolutamente ningún registro en que se indique que alguien pasara hambre.

Hablar de victoria también es relativo, porque fue el propio André de Foix el que decidió levantar el cerco y poner pies en polvorosa ante la inminente llegada de las tropas castellanas al mando del Duque de Nájera y dado que sus propias tropas tenían la intendencia bajo mínimos. Es posible, al fin y al cabo, que los logroñeses estuvieran comiendo mucho mejor que los franceses.

San Bernabe Con motivo de la festividad se monta un arco conmemorativo.

La Cofradía del Pez

En los días anteriores a San Bernabé Logroño se transforma en una ciudad medieval. En la orilla del río unos voluntarios recrean el campamento francés, dentro de la ciudad otros recrean las soldadas logroñesas y a distintas horas se celebran incluso recreaciones de batallas. Y, sí, también hay mercadillo medieval con crepes y jabones. Imposible librarse de esto.

Aunque la leyenda habla siempre de “peces” hoy en día se reparte siempre trucha asalmonada de piscifactoría

En la madrugada del día 11, se encienden lucernarias para recrear que la ciudad estaba despierta a esas horas para pescar y comer. Pero no es hasta primera hora de la mañana cuando la Cofradía del Pez despliega frente al arco del Revellín, el único vestigio que queda en pie de la antigua muralla de la ciudad, enormes marmitas en las que fríen en torno a 20.000 raciones de pescado.

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Aunque la leyenda habla siempre de “peces” hoy en día se reparte siempre trucha asalmonada de piscifactoría, junto a un panecillo y una jarrita de vino.

Los historiadores tienen claro que el reparto del pan, peces y vino es una tradición relativamente moderna, inventada hace menos de un siglo por los mismos amigos que constituyeron la Cofradía del Pez.

Pese a esto, la Cofradía es hoy toda una institución en Logroño. Y no es fácil acceder a ella. Solo puede haber 26 Cofrades de Número, como resultado de la suma de 11+6+1+5+2+1 (11 de junio de 1521). Como explican en su página web, las únicas condiciones para ser cófrade pasa por “ser hijos de la Ciudad y haberse distinguido por su amor a Logroño”. Eso y estar disponible el 11 de junio para freír peces.

Imágenes | Cofrafía del Pez/Pacoperez6
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