Hoy os traemos un pastel con un producto de temporada, la calabaza. No hay nada más otoñal que esta baya de cáscara dura, fruto ideal para darle sabor dulce y jugosidad, a nuestra tarta de especias, calabaza y crema de queso, que creemos os va a encantar.
El invento tiene poco que ver con la clásica tarta de calabaza y ni siquiera se parece a la tarta de queso y calabaza que ya teníamos entre nuestro repertorio. El resultado, en realidad, tiene más que ver con el de la clásica tarta de zanahoria.
Por casi todos es sabido que hay muchas hortalizas como el calabacín, la zanahoria, la remolacha, que, incluidos entre los ingredientes de un bizcocho o pastel, le aportan una textura más húmeda a la miga que los hace irresistible, aún incluso a los más reacios a "comer verde".
Para preparar esta tarta podéis asar vosotros mismos al horno una calabaza cacahuete, o la variedad que más os guste, y preparar el puré casero. Además es un puré que congela bien y que podéis reservar para otro tipo de preparaciones como una crema para la cena, un bizcocho para el desayuno o un pie de calabaza como postre.
Así que hoy estrenamos otoño invadiendo nuestra cocina con el inconfundible aroma de la calabaza asada y las especias de pan de especias.
Comenzaremos precalentando el horno a 180° centígrados. Mezclamos la harina, el baking powder Royal, el azúcar moreno, la almendra en polvo y las especias en un bol grande.
Hacemos un hueco y rompemos los huevos en él. Batimos todo junto, incorporando gradualmente los ingredientes secos, luego añadimos el puré de calabaza y el aceite de girasol. Mezclamos bien.
Vertemos la mezcla en un molde desmontable de 20 centímetros de diámetro untado con mantequilla y enharinado. Lo metemos en el horno y lo horneamos durante 45 minutos. Comprobamos el punto de cocción introduciendo la hoja de un cuchillo en el centro del pastel.
Dejamos enfriar el bizcocho y lo pasamos a una rejilla. Con un cuchillo de sierra cortamos el bizcocho en tres discos de grosor similar.
En un bol ponemos la mantequilla a temperatura ambiente y con una batidora de varillas batimos tres minutos a velocidad alta
Añadimos el azúcar glas tamizado y batimos de nuevo otros tres minutos.
Agregamos finalmente el queso crema bien frio y batimos todo junto durante dos minutos.
Ponemos la crema de queso en una manga pastelera con boquilla lisa y hacemos una espiral de crema en el primer disco. Tapamos y repetimos la operación.
Repartimos con espátula el resto de la crema de queso por la superficie del pastel. Dejamos en nevera.
Con qué acompañar la tarta de calabaza, especias y queso crema
La tarta de calabaza, especias y queso crema es un pastel ideal para una deliciosa merienda , acompañando un café o un té. Es un pastel que debe conservarse bien tapado en el frigorífico por llevar la crema fresca de queso y que se debe de consumir en un máximo de tres días.
En DAP | Calabaza a la napolitana. Receta
En DAP | Toña de calabaza. Receta