Cuando apetece comer ligero, esta receta de ensalada de queso feta y berenjenas a la plancha es perfecta. Se puede servir tanto templada como fría y, en cualquier caso, la vais a encontrar deliciosa. Sobre todo si sois amantes de la berenjena.
A nosotros nos gusta la berenjena de todas las formas, pero nunca la habíamos combinado con queso o alcaparras. Sólo podemos deciros que repetiremos esta receta en más ocasiones, porque el sabor de cada ingrediente en solitario es muy bueno, pero reunidos en esta ensalada quedan espectaculares.
Empezamos lavando, despuntando y cortando la berenjena en rodajas. La ponemos en un colador, la espolvoreamos de sal y la dejamos reposar unos 20 minutos para que se desprenda del exceso de humedad. Enjuagamos las rodajas con agua y las secamos con papel de cocina. Cortamos los tomates a gajos y los ponemos en un bol grande con las alcaparras y la menta. Reservamos mientras preparamos el aliño.
Para el aliño, ponemos el vinagre, la sal, la pimienta, el orégano, el aceite de oliva y el aceite de cacahuete en un bol y los batimos. Echamos el aliño sobre los tomates y reservamos. Untamos las rodajas de berenjena con aceite de oliva y las asamos a la plancha hasta que estén hechas por ambos lados. Para servir, disponemos la berenjena en una bandeja y repartimos por encima la ensalada de tomate y el queso feta.
Con qué acompañar la ensalada de queso feta y berenjenas a la plancha
Esta receta de ensalada de queso feta y berenjenas a la plancha es ideal para servir de primero o también en una cena informal en una bandeja grande, para que cada comensal se sirva la cantidad deseada. Os recomiendo servir un poco de aliño aparte para cada uno se pueda poner el que quiera.
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